Verónica Giménez, veronica.gimenez@nacionmedia.com

El cáncer colorrectal es el tipo de cáncer más frecuente y la tercera causa más común de muerte por cáncer en Paraguay, que en los últimos años ataca a más pacientes muy jóvenes. El especialista en coloproctología Daniel Muñoz señaló que esta enfermedad se puede prevenir y tratar si se detecta de manera temprana.

Hoy se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de Colon para resaltar la importancia de su detección, así como para promover hábitos de vida saludables que puedan disminuir el riesgo de padecer la enfermedad. El cáncer de colon afecta a hombres y mujeres, y aunque es más frecuente a partir de los 50 años, una reciente investigación informó que su incidencia es cada vez mayor en personas de entre 30 a 35 años.

“Se puede definir como un crecimiento desordenado de las células del colon y recto que finaliza en la formación de un tumor, causada por dos factores: genéticas y ambientales. Estas cuestiones ambientales se deben a un alto consumo de comidas con grasas, poca ingesta de frutas y verduras, exceso de alcohol y tabaco, y también influye el sedentarismo”, explicó el profesional en conversación con el diario La Nación/Nación Media.

Los síntomas de esta enfermedad son el cambio en hábitos fecales, sangrado al defecar, diarrea, estreñimiento o la sensación de que el intestino no se vacía por completo, dolores, molestias o cólicos abdominales que no desaparecen, y una pérdida de peso inexplicable. “Desde el primer síntoma a pesar que sea en cantidades pequeñas es motivo suficiente para que la persona consulte inmediatamente con un profesional médico”, señaló.

El doctor Daniel Muñoz, quien también se desempeña como presidente de la Sociedad Paraguaya de Coloproctología, insistió en la necesidad de realizarse controles a tiempo, de llevar una vida más saludable para prevenir su desarrollo y remarcó que existen opciones para las distintas etapas de la enfermedad, si su detección es temprana.

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“Los pasos a seguir son hacer el diagnóstico, la anatomía patológica, la biopsia, confirmar el diagnóstico y luego hacerse los estudios de estadificación para ver qué tan extendida está la enfermedad. Una vez que tengamos todos esos datos se plantea el tratamiento, el pilar del tratamiento para el cáncer colorrectal hasta hoy en día es la cirugía”, detalló. Además, explicó que hay otros tratamientos que contribuyen o son poscirugía para curar, controlar o atenuar las consecuencias de un cáncer muy avanzado.

“Hay que insistir en que el cáncer detectado en etapas tempranas tiene un alto porcentaje de curación”, remarcó. Por otra parte, comentó que hace unos años se hizo una revisión sobre esta enfermedad en los principales hospitales de Asunción y el Área Metropolitana, y el resultado fue que más de dos tercios de los cánceres en Paraguay son avanzados.

La Facultad de Medicina de la UNA también estudió la enfermedad hace unos años e informó que el 30% de los pacientes que consultan por obstrucción intestinal, es decir, con dificultades para ventosear y defecar, padecen cáncer colorrectal. Por esta razón, la prevención es fundamental y encontrar al cáncer en sus etapas iniciales, amplía las posibilidades de curación.

En un estudio publicado por la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer, los investigadores estimaron que este año 153.000 personas serán diagnosticadas con cáncer colorrectal en Estados Unidos. De esos casos, alrededor del 13 por ciento correspondería a personas menores de 50 años, lo que representa un aumento del 9 por ciento de los casos en este grupo etario desde el 2020.

“Cada vez vemos en pacientes más jóvenes y eso llama mucho la atención porque son personas que trabajan y están en edad de tener hijos. Entonces, esto es un problema no solo personal, también familiar, social y de salud pública. Desde la Sociedad Paraguaya de Coloproctología trabajamos con el Ministerio de Salud y otras sociedades afines para concienciar a la población sobre la importancia del control precoz”, concluyó.

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