Se suman las denuncias de mal servicio en el Instituto de Previsión Social (IPS). Familiares de un paciente de 75 años denunciaron que no pudieron conseguir una ambulancia para trasladarlo desde San Antonio hasta el Hospital Central. El hombre fue tratado con un analgésico y su requerimiento era terapia intensiva. Pese a su grave estado, le dijeron que retornara a su casa y falleció el sábado en la citada periférica del instituto.
Paola Cabral, hija de don Felipe Nery Cabral, relató la triste experiencia que les tocó vivir cuando impotentes buscaron ayuda para el septuagenario, pero desafortunadamente perdieron al familiar. Don Felipe era jubilado luego de haber trabajado en una empresa multinacional (Coca Cola) y aportó durante 30 años al seguro social. Falleció en el pasillo al no poder conseguir una unidad de traslado y una cama en terapia intensiva, según la denunciante.
“Mi papá murió acá en el pasillo del IPS de San Antonio, es una vergüenza. El doctor dijo que en el Hospital Central de IPS tampoco había para llevarle a mi papá, no había lugar tampoco en Ingavi. O sea que le iban a dejar nomás ya luego a mi papá para que se muera en IPS de San Antonio”, contó en contacto telefónico con el canal GEN/Nación Media.
Relató que su padre fue asistido primeramente el viernes a las 8:00 de la mañana en la periférica de San Antonio. “El doctor me dijo que mi papá ya estaba muy mal y que necesitaba que le llevemos, fue a eso de las dos de la tarde. Es una vergüenza porque mi papá aportó más de 30 años y murió esperando ambulancia”, lamentó.
La situación del paciente fue empeorando hasta que el sábado se produjo su deceso. “Mi papá ingresó el sábado a las 8:00 de la mañana y para las 9:00 de la noche ya falleció. Nos dijeron que no aguantó, que le dio un paro porque tenía que irse a otro lado, donde tenía que realizarse estudios. Pero yo no podía hacer nada, porque en la Central dijeron que no había más lugar. Ni tampoco le podíamos llevar a otro lado a mi papá, porque ya estaba muy grave. No se le podía tocar”, manifestó.
Indignada, Paola indicó que don Cabral recibió tratamiento con Z-mol y le colocaron suero en la clínica de San Antonio. “Me dijeron, llevale a tu papá para que descanse, después se volvió a sentir mal y le llevamos. Y no le hacían caso, estaba sentado y no podía respirar. Y le dije a la enfermera que le atendieran porque ya no podía caminar. Después ya le internaron y pasaron las horas y necesitaba ingresar a la Central, pero no había ambulancia”, lamentó.
Paola dijo que son ocho hermanos y que queda la viuda, que ahora deberá contratar los servicios de un abogado para realizar los reclamos pertinentes por la mala atención que le brindaron a su finado padre.