Vecinos de distintos barrios de Asunción, Luque y Lambaré denuncian innumerables casos de polución sonora por el alto volumen de música de otros vecinos en los últimos días. Desde la Policía Nacional reportan decenas de llamadas de ciudadanos que realizaron sus quejas, principalmente a través del Sistema 911, que registró la mayor cantidad de incidentes en dichas ciudades.
La música estridente desde los equipos de sonido en domicilios o altoparlantes en vehículos son el denominador común en distintos barrios. Recuerdan que luego de realizar la denuncia en la comisaría zonal o el Sistema 911, el procedimiento de los agentes policiales se debe regir en acudir al lugar, intentar llegar a un acuerdo con la persona denunciada debido a que los ruidos afectan a su entorno más cercano y solicitar disminuir el volumen.
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Desde la Policía se menciona un caso ocurrido en el barrio Kennedy de Lambaré, donde se registró un reclamo en los últimos días en una casa que funciona como inquilinato, sobre la calle Campo Vía, donde desde el mismo lugar varios ocupantes ya causaron molestias en reiteradas ocasiones al vecindario, por lo que los pobladores padecen constantemente una desagradable situación.
Lamentan que en muchos casos los denunciados acceden a bajar el volumen, pero una vez se retiran los efectivos policiales nuevamente suben y el afectado vuelve a llamar a la comisaría. En consecuencia, el personal policial ya procede a identificar al denunciado, se labra acta y se documenta.
“La Policía Nacional acude al lugar, primero solicita a las personas bajar el volumen atendiendo el derecho de las otras personas. Lastimosamente, a veces reaccionan con agresiones verbales o físicas, y si están con sustancia química de por medio, todo se exacerba mucho más. En caso de esta situación, el personal se ve obligado a utilizar de manera legal la fuerza”, expresó la subcomisaria Nidia Paredes, subjefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, en una entrevista con La Nación/Nación Media.
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A disposición de la Fiscalía
La jefa policial afirmó que el ambiente festivo de fin de año colabora a que se ocasionen molestias a personas que optan por descansar, se encuentren con un problema de salud o simplemente asumen su derecho de disfrutar de un ambiente tranquilo en sus hogares.
“Si el ruido viene de un inquilinato, el acto es del inquilino, se verifica, se corrobora la habitación desde donde sale el alto volumen, entonces la Policía tiene que identificarlos, verificar su actitud y lastimosamente las personas terminan aprehendidas. Luego se pone todo a disposición del Ministerio Público”, afirmó Paredes.
La jefa policial señaló que una dotación de personal policial recibió una capacitación sobre cómo proceder en cumplimiento a la Ley 6.390/2020 “Que regula la emisión de ruidos” y que establece claramente que la Policía Nacional está facultada para actuar, de oficio o por denuncias, en conjunto con el Ministerio Público, de manera de ordenar el cese de ruidos molestos, de forma inmediata, en recintos privados y/o públicos.
Recuerdan que también existe una ordenanza municipal de la ciudad de Asunción Nº 183/04 “Que regula los ruidos molestos”, por lo que agentes de la Policía Municipal de Tránsito pueden también intervenir y sancionar económicamente a los denunciados. Desde la comuna capitalina señalan que es administrativa la multa que puede llegar hasta 100 jornales, rondaría los G. 6.000.000 y va hasta los G. 9.000.000.
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