Hace unas semanas se dio a conocer la propagación del virus del camello o gripe del camello en el Medio Oriente, que está causando impresión y un poco de temor en todo el mundo, pero de ¿qué se trata? ¿Es una nueva enfermedad parecida al COVID-19? ¿Volveremos a encerrarnos? Son algunas de las interrogantes que surgen. Profesionales aseguran que se trata de una enfermedad que se descubrió hace 10 años y que es un tipo de coronavirus de esta zona del mundo.

Según el doctor Tomás Mateo Balmelli, esta es una enfermedad que fue descubierta en hace 10 años, que forma parte de la familia coronavirus como el COVID-19 y cuyos síntomas son respiratorios, pero que tomó notoriedad y se volvió a propagar luego del encuentro deportivo más importante del mundo el Mundial de Fútbol que se desarrolla en Qatar.

“El virus del camello, como lo denominan ahora, es una forma del coronavirus que fue descubierto en un brote epidémico hace en el 2012 en Arabia Saudita, conocido como el MERS y apareció luego del primer SARS-CoV-1 que fue en el 2002 en el Asia”, confirmó el Mateo Balmelli en entrevista con La Nación/Nación Media.

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Aseguró que la transmisión interhumana de este virus es muy difícil y que es necesario tener un contacto muy estrecho con los camellos o dromedarios para poder contagiarse. “Tiene que haber un contacto directo con el camello. Se piensa que este virus también proviene del murciélago y es un virus que se presenta en el Medio Oriente anualmente”, señaló.

Agregó que esta enfermedad también se ha detectado en 25 países de Europa, pero que no se da una epidemia porque es difícil el contagio de persona a persona. “También se puede contraer por ingestión de leche no pasteurizada o carne mal cocida de estos animales. Hoy vemos un aumento inusual de casos, tal vez por la aglomeración de gente por el mundial”, apuntó.

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Balmelli llamó a la población a mantener la calma ya que el contagio es muy bajo, pero que lamentablemente no existe un tratamiento para el mismo y tampoco vacunas para prevenir. “Se estimas que los cuadros pueden ser más severos que el COVID-19. La mortalidad oscila el 34%, según la Organización Mundial de la Salud, que tendrían los subregistros”, manifestó.

En cuanto a los síntomas el profesional expresó que son muy parecidos cualquier enfermedad respiratoria tipo coronavirus. “También se presenta cuadros de congestión, tos, dolor torácico, puede haber diarrea. Los pacientes más afectados pueden ser los de edad avanzada o que tengan algún tipo de comorbilidad”, refirió.

Cabe destacar que hace unos días se reportó el fallecimiento de un periodista deportivo que estaba cubriendo los encuentros de fútbol en el Mundial de Qatar. El mismos había tenido algunos problemas de salud y que recibió tratamiento para lo que parecía ser una bronquitis, que podría tener relación con el virus del camello.

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El profesional quiso hacer puntapié de que tanto en la región como en el país aumentaron los casos de COVID-19 y que teniendo en cuenta la llegada de las fiestas, se tiene mayor aglomeración en los espacios públicos. “Tenemos un alto subregistro de casos de SARS-CoV-2, porque la gente ya no se realiza los test y los que se testean en un alto porcentaje sale positivo”, declaró.

Instó a las personas que ante cualquier síntoma acudan a los hospitales que se realicen el hisopado y que mantengan las medidas de prevención como el uso de tapabocas donde se concentran una importante cantidad de personas, evitar contacto en caso de presentar síntomas. “No debemos asustarnos por el MERS o virus del camello”, concluyó.