Un poblador de la ciudad de Capiatá realizó una denuncia de contaminación y polución ambiental en un vertedero clandestino que opera en la zona. El predio pertenecería a una mujer que es familiar del exintendente y actual precandidato a gobernador por Fuerza Republicana, Luis Fernando González.
Don Ritti Colmán, habitante de la 1ra. Compañía Naranjaty de Capiatá, en entrevista con La Nación/Nación Media comentó que desde hace un tiempo viene operando en ese sector de la ciudad un vertedero que ya ha contaminado cinco nacientes de agua dulce que alimentaban el arroyo Capiatá.
Una importante cantidad de basura ha logrado acumularse con el paso del tiempo en el lugar, que no contaría con la debida autorización por parte de la Municipalidad de Capiatá y, por consiguiente, operaría de forma clandestina, de acuerdo a lo que manifestó.
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Asimismo, recordó que a causa del agua contaminada sus vacas lecheras habían sufrido una intoxicación tiempo atrás, pero afortunadamente pudo salvarles la vida tras acudir de urgencia a un veterinario.
Con cada lluvia, residuos de todo tipo son arrastrados hasta el cauce del arroyo Capiatá, el cual a su vez desemboca en el arroyo Yukyry que es uno de los principales afluentes del lago Ypacaraí, que actualmente avanza lentamente en su proceso de recuperación a raíz de la contaminación.
Hace unos días también se produjo la quema de cubiertas en este mismo vertedero, generando una inmensa cortina de humo negro que podía divisarse desde varios kilómetros de distancia y causó gran preocupación entre los pobladores del barrio, quienes decidieron hacer sus respectivas denuncias ante emisoras locales para frenar la situación.
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Colmán confirmó que este predio donde opera el vertedero clandestino pertenece a un familiar del exintendente de Capiatá y actual precandidato a gobernador por el movimiento Fuerza Republicana, Luis Fernando González. Considera que dicho vínculo le habría permitido operar impunemente.
Desde la última denuncia vecinal, los camiones recolectores municipales ya no ingresan al predio, mencionó, aunque se mantiene latente el temor de que en cualquier momento vuelvan a llevar la basura de manera indiscriminada.