El director del Instituto Nacional de Estadística, Iván Ojeda, en conferencia de prensa respondió sobre las zonas no cubiertas durante el Censo Nacional de Población y Viviendas 2022, y según dijo se llegó a censar al 90% de la población en el interior del país. Argumentó que las zonas no censadas se debió a la masiva deserción de voluntarios, principalmente en Asunción y Central.
“El balance fue positivo, aunque hubo deserción de los voluntarios. Nadie va a ser multado ni quedar sin ser censado. Tenemos una cobertura del 90% en el interior del país, pero en Central y Asunción tuvimos algunos voluntarios que desertaron y fueron reemplazados por militares y policías, en algunas zonas pudimos cubrir, en otras no. Vamos a tener el proceso de recuperación de dos semanas”, expresó Ojeda.
Ojeda reconoce que las líneas 178, call center del INE, y del Sistema 911, se encuentran colapsadas ante el aluvión de reclamos de personas que estuvieron en sus casas durante todo el día sin haber sido censadas, por lo que señalan que habrá un proceso de recuperación de datos con aquellas personas que no fueron visitadas.
“La línea está colapsada por la enorme inquietud de la gente. También tenemos habilitadas nuestras redes sociales para recepción de los reclamos y también números de líneas celulares. Tenemos una cobertura general positiva, pero sí hubo zonas de Asunción y Central donde no se pudo llegar. Tenemos mejor cobertura en el interior”, reconoció Ojeda, dando pie a los masivos reclamos de internautas en redes sociales.
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Según Ojeda, la prioridad del INE es que todos los paraguayos sean censados y que supuestamente el 90% de la población fue censada más allá de la capital del país y el área metropolitana. Sin embargo, el aluvión de quejas levanta muchas dudas sobre este porcentaje también en el interior del país e incluso señaló que se trata de una situación “normal” que no se haya llegado a todas las viviendas.
Las razones de la masiva deserción fueron diversas, como la poca paga por el voluntariado, lo que reconoció Ojeda, entre ellos un 20% del total de los voluntarios avisó que no iban a participar de la jornada hasta anoche y durante el mismo día del censo. “Las razones por las deserciones pueden ser varias, algunos alegaron problemas familiares, que tenían que estudiar y algunos ni avisaron”, señaló en conferencia prensa del INE.
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“El censo tuvo un costo de US$ 43 millones. La poca remuneración pudo ser también un motivo de deserción. Ahora tenemos un equipo de casi 2.000 personas contratadas que iban pensando en el proceso de recuperación. Los jefes de zonas nos informan que los voluntarios quieren volver a hacer el censo”, manifestó Ojeda.
Miles de personas reportan hasta estas horas en redes sociales que esperaron a los censistas durante todo el día; sin embargo, los mismos no se presentaron en sus zonas. Las denuncias no cesan hasta pasadas las 20:00, luego de dos horas del fin del censo. “En 7 meses de procesamiento el objetivo es que tengamos los primeros datos. Al ser un proyecto de 5 años, los siguientes años también son de procesamiento de datos”, dijo Ojeda.
Los censistas estuvieron operativos hasta las 18:00, hora en que se levantó toda restricción de desplazamiento, por lo que miles de personas se volcaron a las calles para pasear o realizar compras en los supermercados, en su mayoría. Las personas no censadas con agendamiento acordado serán visitados por representantes del INE.