La ciudadana brasileña Isabel Streski, madre del joven estudiante universitario brasileño desaparecido el pasado 4 de octubre, llegó al país y junto a los compañeros universitarios de su hijo se manifestaron esta mañana frente al Consulado General de Brasil en Paraguay, para exigir mayor interés en la búsqueda de su hijo.

Antonio Augusto Streski Manjinski, de 25 años, quien cursa el último año de la carrera de medicina en la Universidad María Auxiliadora (UMAX) de Loma Pytä, desapareció en extrañas circunstancias de su departamento compartido con amigos y compañeros. El mismo no llevó consigo documentos, dinero ni el teléfono celular, por lo que sus compañeros dieron aviso a sus familiares y denunciaron el hecho ante la Comisaría N°22 de la mencionada zona.

“Lastimosamente, yo me voy adelantando a las investigaciones, yo estoy teniendo que pasar información para la Policía, eso me duele demasiado, porque tendría que ser al revés, la Policía me tenía que traer información y yo soy quien provee información a la Policía, eso no es justo. No hay interés, todas las informaciones fueron buscadas por mi familia y amigos”, dijo Streski visiblemente sentida por la supuesta falta de interés de las autoridades.

El fiscal Aldo Cantero, quien se encuentra a cargo del caso, había impartido el viernes una orden de búsqueda y localización del joven brasileño, quien se encuentra con paradero desconocido. Cualquier información que ayude a localizarlo llamar al Sistema 911 o a la Comisaría más cercana.

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La madre, entre lágrimas comentó que otras mamás de estudiantes brasileños, se habían contactado con ella y le contaron que sus hijos desaparecieron de la misma forma que su hijo, pero que en breve tiempo aparecieron, con actitudes totalmente extrañas. Una estudiante supuestamente había desaparecido, luego apareció y desde hace dos años se encuentra internada en un neuropsiquiátrico y otra presenta un retraso mental que es tratada como a una bebé, tras ser hallada.

“Otras madres se callaron, yo no me voy a callar, si eso va costar mi vida estoy aquí. No hay ninguna hipótesis sobre la desaparición, eso es lo peor. Todos tenemos conocimiento del narcotráfico que hay en Paraguay, por lo que fue la primera cosa que busqué, si mi hijo era usuario, si mi hijo era parte de un negocio, estaba involucrado en algo y tanto nuestra investigación particular, como la Policía descartó esa hipótesis”, indicó la mujer a canal GEN-Nación Media.

Lamentó que el Consulado General de Brasil, como compatriota brasileña no se haya acercado a ella a ofrecerle una botella de agua, o al menos una carpa para refugiarse durante el tiempo de búsqueda de su hijo en Paraguay. Por lo que exige mayor interés de las autoridades paraguayas para dar con su hijo, quien vino a Paraguay con el sueño de convertirse en médico.

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