Pobladores de la ciudad de Emboscada, Cordillera, denuncian este miércoles que desde hace tres meses padecen problemas por falta de agua en sus hogares, puestos de salud y escuelas. Reclaman a la aguatería de la Junta de Saneamiento Cuarta Compañía por falencias que afectan a la comunidad, según un informe del canal C9N.
Gabriela Ovelar manifestó que cortan el suministro de agua potable desde la aguatería sin ningún motivo y agregó que pagan por un servicio que no está cumpliendo, lo que constituye en una acción contra decenas de familias. Señalan a un militar retirado de apellido Álvarez como el causante de la situación.
“A esta gente no le importa nada. Es muy prepotente, es un coronel retirado, no recuerdo su nombre, su apellido es Álvarez. Estamos pagando por un servicio que él no nos está proveyendo. Imaginate estar tres meses sin agua. Nosotros le estamos pidiendo agua nomás”, expresó la denunciante en contacto con C9N.
Lea también: Detienen a dos policías por robo de 2.500 municiones de la Comandancia
Los afectados residen en una zona humilde de la ciudad de Emboscada donde el servicio de la Esaap no alcanza a llegar, por lo que las aguaterías privadas abastecen del servicio a las familias. En ese sentido piden que por cuestiones “políticas” la situación se agravó con el paso del tiempo, mientras que las familias imploran el servicio.
Los pobladores no descartan solicitar a la Secretaría Nacional de Emergencia (SEN) que acuda a la zona para paliar la falta de agua, principalmente en las instituciones educativas y puestos de salud.
La provisión de agua potable es una de las deudas en nuestro país, ya que el servicio no llega a los sitios más alejados y sobre todo los más humildes. La falta del vital líquido propicia enfermedades no solo gastrointestinales, sino además, parásitos y otros.
Dejanos tu comentario
Foro de agua y saneamiento: llaman a fortalecer la inversión en infraestructura sostenible
El 6° Foro Nacional de Agua y Saneamiento Adecuado se realizó el pasado 19 de noviembre con el lema Inversiones en agua potable y saneamiento: Soluciones sostenibles frente al cambio climático. El evento reunió a más de 660 participantes en formato híbrido, que incluyó una audiencia presencial y virtual.
Profesionales de diversas áreas, instituciones públicas, privadas, organizaciones sociales y líderes comunitarios participaron en tres paneles temáticos donde se discutieron los principales desafíos y soluciones ante el cambio climático, así como la importancia de fortalecer la inversión en infraestructura sostenible.
Se realizaron paneles para abordar distintos temas, entre ellos el desafíos de los efectos del cambio climático en el sector de agua y saneamiento, que fue moderado por Ana Margarita Ramos de Unicef. Allí se analizaron los impactos del cambio climático en los sistemas de agua y saneamiento.
Te puede interesar: Detienen a una mujer acusada de matar a su tía a machetazos
Los expertos destacaron las variaciones en los recursos hídricos, la necesidad de una gestión integrada y la inequidad en el acceso al agua, resaltando las diferencias significativas en el uso de agua entre las regiones oriental y occidental del país.
El segundo tema fue las “experiencias regionales en resiliencia climática y agua y saneamiento”, moderado por Paula Burt, coordinadora programática de la Fundación Avina. Allí se presentó los casos exitosos y buenas prácticas en adaptación climática.
Los panelistas coincidieron en la necesidad de expandir estas soluciones a escala, más allá del área metropolitana de Asunción, asegurando el acceso al agua potable para todas las personas. Se resaltó la importancia del diseño participativo de soluciones de agua y saneamiento considerando las condiciones sociales, culturales y ambientales del lugar.
En tanto, en el panel “Planes, programas e inversiones públicas en adaptación climática para el sector agua, saneamiento e higiene (ASH)”, moderado por Raquel Bertrán, gerente de recursos de Hábitat para la Humanidad Paraguay, se abordó el financiamiento público y las estrategias necesarias para fortalecer el sector con infraestructura resiliente.
Los expertos discutieron la importancia de adaptar los proyectos a los contextos locales y de involucrar a todos los actores en la implementación de soluciones sostenibles.
El foro concluyó con un llamado a la acción, instando a aumentar las inversiones, priorizar soluciones concretas y fortalecer la cooperación para garantizar el acceso al agua de calidad y saneamiento adecuado para todas las personas. El evento estuvo organizado por Hábitat para la Humanidad Paraguay, en colaboración con el Observatorio Ciudadano de Agua y Saneamiento (OCASH) y el auspicio de Unicef.
Dejanos tu comentario
Régimen cerrado es clave para dar estabilidad al sistema penitenciario, afirman
Actualmente son dos los centros penitenciarios en los que está habilitado el régimen cerrado, ellos son el penal Martín Mendoza de Emboscada y el de Minga Guazú, a donde se destinan a las personas privadas de libertad con alto perfil criminológico y guardan reclusión en celdas individuales, sin contacto con los demás.
“El régimen cerrado especial es necesario para mantener o tratar de mantener la calma y demostrar el interés del Estado porque cambien las cosas dentro del sistema penitenciario que tan golpeado estuvo dentro de los últimos tiempos”, expresó Víctor Benítez, viceministro de Política Criminal a la 650 AM.
Mencionó que a casi un año de la implementación de este régimen, varios representantes legales han accionado apuntando a que sus clientes pasen al régimen ordinario, pero de acuerdo al entendimiento del Poder Judicial, este sistema especial se adecua a las normas vigentes y es necesario para el ordenamiento penitenciario.
Lea también: Estado paraguayo adoptará un enfoque preventivo en su lucha contra la corrupción
“En el régimen cerrado especial hay una capacidad para 82 personas de alto perfil, son celdas individuales, está destinado para aquellos con altas condenas o ligados al crimen organizado, personas que no se adecuan al sistema ordinario o que dentro del mismo son líderes dentro de esa penitenciaría y tienen a un grupo importante alrededor”, detalló.
El viceministro señaló que las personas de alto perfil no demuestran una predisposición a cumplir con los reglamentos de un centro penitenciario, por lo que son destinados a dicho régimen hasta que ellos mismos puedan tener las características para formar parte del régimen ordinario. Benítez indicó que se realizan evaluaciones por el organismo criminológico para determinar si son aptos o no para cambiar de régimen.
“Creo que para cualquier persona sería duro, más todavía para ellos que hacían lo que querían, seguían con sus operaciones desde las penitenciarías, estas personas nunca demostraron interés en dejar de cometer hechos punibles”, recalcó. Cabe destacar que la capacidad de reclusos de los dos centros es para 1.237 personas y cuentan en total con ocho pabellones.
Dejanos tu comentario
Foro Nacional de Agua pondrá foco en inversión y resiliencia climática
Asunción será el punto de encuentro para la discusión sobre el cuidado y acceso al agua en el 6.º Foro Nacional de Agua y Saneamiento Adecuado, que se desarrollará el martes 19 de noviembre, de 8:00 a 12:00 horas en el salón presidencial del Hotel Guaraní (Oliva esquina Independencia Nacional), en Asunción, en un formato híbrido que permitirá la participación tanto presencial como virtual.
La actividad es gratuita, con inscripción previa en este enlace: https://bit.ly/3Ah8HB9. El evento contará con tres paneles que abordarán los retos del sector de agua y saneamiento en un contexto de cambio climático, buscando promover inversiones, así como políticas y estrategias de adaptación en Paraguay. El primer panel se denomina “Desafíos de los Efectos del Cambio Climático en el Sector de Agua y Saneamiento”, que será moderado por Ana Margarita Ramos de Unicef.
Lea más: Este lunes se inicia la Semana de la Cocina Italiana
En la primera presentación participarán: Ing. Fernando Enrique García Alonso, director general de Senasa, el Econ. Alberto Sánchez, vicepresidente de Essap y el Dr. Ing. Andrés Teodoro Wehrle Martínez, Coordinador Académico Adjunto de la Maestría en Ingeniería de Recursos Hídricos. Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (Fiuna). Este panel explorará los impactos directos del cambio climático en los sistemas de agua y saneamiento, analizando fenómenos como la sequía y las lluvias extremas que afectan la infraestructura y los servicios básicos.
En el panel 2, “Experiencias Regionales en Resiliencia Climática y AS (Agua y Saneamiento)”, modera: Paula Burt de Avina. Participarán: Ing. Fernando Enrique García Alonso, Senasa; Lic. Carla Torreani, Gerente de Gestión Sostenible del Agua, Fundación Moisés Bertoni; Arq. Julio Rodas, Consultor de Mingarã, Asociación para el Desarrollo Sustentable; Arq. Liz Sanabria, Hábitat para la Humanidad Paraguay y el Ing. Roberto Lima Morra, representante del sector de la academia. Este panel compartirá experiencias sobre cómo diferentes actores han enfrentado los desafíos climáticos a través de iniciativas de resiliencia, presentando casos exitosos y buenas prácticas.
Lea también: IPS desembolsa casi USD 100 millones para 82.000 jubilados
El panel 3, sobre “Planes, Programas e Inversiones Públicas en Adaptación Climática para el Sector ASH”, será moderado por Raquel Bertrán de Hábitat para la Humanidad Paraguay. Participarán: Ing. Claudia Crosa, directora de Dapsa; Ing. Gustavo Gonnelli, Especialista Senior en Agua y Saneamiento, BID; Rafael Ruipérez, representante de la Aecid, Mtr. Hernán Benítez, Ejecutivo Senior, CAF; Ing. Jorge Villagra, director general de Inversión Pública del Viceministerio de Economía y Planificación (MEF). Este panel abordará las iniciativas y el financiamiento público necesarios para fortalecer el sector, enfocándose en la inversión en infraestructura resiliente y en el desarrollo de programas de adaptación.
Este foro es organizado por Hábitat para la Humanidad Paraguay en colaboración con el Observatorio Ciudadano de Agua y Saneamiento (Ocash), y el auspicio de Unicef. El Ocash fue conformado en marzo del 2020, con el apoyo de Unicef y la participación de organizaciones como: Hábitat para la Humanidad Paraguay, Ceamso, Fundación Moisés Bertoni, Fundación Avina, Mingará, Pro Comunidades Indígenas, y la Red de Jóvenes por el Agua.
Dejanos tu comentario
Una comunidad pesquera que rema en busca de un mejor porvenir
- Por Paulo César López
- paulo.lopez@nacionmedia.com
- Fotos. Jorge Jara
La isla Banco’i está situada a 47 km del casco urbano del distrito de Arroyos y Esteros, en el departamento de Cordillera. Si bien está localizada a menos de 80 km de la capital, en la práctica se encuentra más aislada que muchos sitios más remotos del país. Un equipo de La Nación/Nación Media realizó una expedición a esta maravilla de la naturaleza que alberga a humildes familias campesinas, que con dignidad luchan por un mejor mañana en medio de austeras condiciones de vida.
A la altura del kilómetro 50 de la ruta PY03 torcemos el rumbo hacia la izquierda y atravesamos sucesivamente unos 10 portones hasta llegar a la estancia Olivares. Allí nos recibe Arturo Alvarado, propietario de la Estación Puerto Olivares, un complejo turístico medioambiental cuyas instalaciones tienen motivos vinculados a los ferrocarriles y que brinda distintos tipos de servicios recreativos a los visitantes.
Nos munimos de abundante agua fría y nos dirigimos al puerto, donde ya nos estaba aguardando Ever Martínez, un hombre de poco más de 30 años curtido por el sol, con su canoa amarrada al lado de la balsa en la que el sitio turístico ofrece paseos a los visitantes.
Si bien lacónico, Ever es de trato afable y por breves intervalos hasta algo conversador. Durante el lento avance nos cuenta que es originario del islote, donde también nacieron sus padres, además de otros pormenores de la vida diaria en medio del semiaislamiento. Esta recluida comunidad está compuesta de 21 familias, que totalizan unas 70 personas, cuya principal actividad es la pesca, la pequeña agricultura y la cría de ganado menor.
DELTA
Tras casi una hora de travesía, llegamos al extremo de esta isla de unas 600 hectáreas bañada por las aguas de los ríos Manduvirá, Yparaguaymi y Paraguay, donde estos dos últimos cursos se cruzan en el delta sin mezclarse manteniendo sus respectivas tonalidades, más oscuro el uno y más blanquecino el otro.
Desembarcamos en el banco de arena donde cazaban los mbiguá y las garzas mora para hacer unas tomas. A lo lejos se observa unas vacas pastando. Cuando le pregunto sobre la demanda más inmediata que tienen los habitantes, Martínez dice que “ko veda aja heta gente oikotevê peteî ayudita’i. Oî gente imboriahúva ha heta ifamilia ha oikotevêva porque ko veda-pe ndocobrái como pescador porque reimeva’erã asociado ha repagava’erã 100.000 por año. La mayoría ko ndaikatúi opaga umía. Ápeko tres o cuátronte ocobra kuri ha oî otros cuátro ocobráva por la tercera edad” (en esta veda mucha gente necesita un poco de ayuda. Hay personas muy pobres y que tienen muchos hijos, y necesitan, porque en esta veda no cobraron el subsidio como pescadores porque hay que estar asociado y pagar una cuota anual de 100.000 guaraníes. La mayoría no puede pagar eso. Acá cobraron solo tres o cuatro y otros cuatro cobran la pensión a la tercera edad).
De manera inmediata hace la salvedad de que “chéko gracias a Dios areko peteî almacen’i che tio ndive ha péicha aaguanta la 45 días ha aipytyvõ avei che rapichakuérape ha ambodeve chupekuéra. Ápe ko nde remaña ha ha’ete ku entero iporãmbáva, ndaha’éi ko péicha hyepýpe. Che añandu la che vecino pyapy mba’éicha hína” (yo gracias a Dios tengo un pequeño almacén con mi tío y así aguanto los 45 días y también les ayudo dándoles fiado. Acá vos mirás y parece todo muy lindo, pero no es así allá adentro. Yo siento cómo es la preocupación de mis vecinos).
Si ya de por sí la pesca encierra un fuerte componente de azar, con la veda y la bajante de los ríos la economía de subsistencia se hace aún más estrecha. A más de ello, el descenso de las aguas ha profundizado el aislamiento, pues en algunos tramos del río Manduvirá es preciso encharcarse los pies para bajar y empujar las canoas a través de las piedras. En ciertos trechos el curso se troca en una senda pedregosa que proyecta la imagen acabada de la isla rodeada de tierra de la que hablaba nuestro escritor supremo.
Actualmente el único punto desde el cual el trayecto a la isla es cien por ciento navegable, incluso para pequeñas embarcaciones, es la estancia Olivares. Esto convierte a este sitio en parada obligatoria para cualquier expedición, así como para los macateros que surten a la ínsula de los productos básicos necesarios.
LA ESCUELA
Luego retornamos aguas abajo para casi a mitad de camino hacer escala en la escuela, donde arribamos cerca del mediodía. Bajo el “sopor de la siesta calcinada” los niños jugaban a la pelota con los pies descalzos. Una límpida bandera paraguaya flamea aletargada en la cúspide del mástil.
En la Escuela 10260 Isla Banco’Yparaguaymi nos recibe su director, unidocente y licenciado en Guaraní, Agripino Acosta, quien vive en Arroyos y Esteros y llega los lunes a la comunidad para permanecer durante toda la semana en la más completa soledad luego de que los niños retornan a sus casas. El maestro nos explica que la institución a su cargo alberga a un total de 13 estudiantes del primero al sexto grado, siete en el primer ciclo y seis en el segundo, en los turnos tarde y mañana, respectivamente.
El rasgo más predominante de los escolares es la timidez y el sacrificio, pues además del poco hablar algunos deben caminar diariamente hasta siete kilómetros para ir y volver de la escuela bordeando el río.
El principal pedido del maestro es la ampliación de los rubros docentes para poder brindar hasta el noveno grado, es decir, la totalidad de la educación primaria obligatoria y gratuita que manda la Constitución Nacional.
“Acá los chicos llegan hasta el sexto y ya abandonan sus estudios porque no quieren salir de su hábitat. Para terminar la primaria deben ir 30 km por el río hasta Itá Pirú, que remando aguas arriba lleva unas cinco horas de viaje”, señala Acosta, quien asegura que la ampliación hasta el noveno grado atraería a estudiantes de comunidades circundantes y se podría llegar a los cuarenta alumnos aumentando el plantel docente.
UNA VOCACIÓN
El profesor Agripino no oculta su angustia ante la apremiante situación y admite que a veces se siente tentado a arrojar la toalla, aunque de súbito recobra la energía para seguir bregando merced al profundo amor que tiene a su vocación. El docente añade que otra de las necesidades más urgentes que tienen es la energía eléctrica y agua corriente, pues algunos deben desplazarse de dos a tres kilómetros hasta el río para recoger el agua en bidones. No obstante, no se queja de la potabilidad del vital líquido que proveen los ríos circundantes asegurando que cualquier malestar asociado a beber de ellos es solo “psicológico”.
Otro de los pedidos es la extensión del almuerzo escolar hasta el mes de noviembre, pues la provisión acabó el pasado octubre y no se pueden racionar los insumos por falta de medios para refrigerarlos.
El maestro hace notar con orgullo que la escuela se encuentra impecablemente limpia, algo que asegura es de todos los días y no fue algo montado en ocasión de nuestra visita. Acosta apunta que esta rutina de aseo es una cuestión de vida o muerte debido a la gran cantidad de víboras y la falta de un puesto de salud para atender una emergencia de este tipo. Esta es otra de las razones por las que les urge la energía eléctrica para poder iluminar sus hogares durante las noches a fin de estar prevenidos ante el acecho de reptiles venenosos y otras alimañas.
LA EDUCACIÓN Y SUS PORQUÉS
Luego lo acompañamos al aula para el desarrollo de la rutina escolar. “Ma’erã ñande ja estudia” (para qué estudiamos), pregunta como preludio de la lección de matemática en la pequeña aula multigrado ornamentada con un retrato del papa Francisco, carteles del abecedario, fechas y algunas operaciones matemáticas elementales.
“Anive hagua ñanembotavy avavéa” (para que nadie nos engañe), responde uno de los más grandes con el sudor brotándole desde la frente y moviendo inquietamente sus polvorientos pies descalzos luego del partido de fútbol que rutinariamente precede a las clases. De hecho, esta es una de las principales razones que atrae a los chicos a la escuela, pues allí se guarda la única pelota que hay en toda la comunidad.
Acto seguido, alternando el guaraní y el español, empieza a impartir las lecciones de suma, resta, división y multiplicación aplicándolas al contexto real de las operaciones de venta y trueque de pescado y miel.
La temperatura máxima pronosticada para la jornada fue de 38 grados con una sensación térmica que holgadamente superaba los 40 grados. La ventana oeste escupe fuego al interior, mientras que la abertura este refresca levemente la salita transportando el microclima de los árboles sembrados hacia la fachada que da al río.
MENSAJE
Mientras nos vamos retirando para que pueda continuar con su clase, le pregunto si desea dar un mensaje final. Entonces Acosta desenfunda una carpeta en la que escribió un mensaje que tenía preparado y procedió a leerlo:
“Una mirada a la vida. Enseñar a ver y mirar es el gran desafío y el futuro de la educación. Queridos educadores, hemos anclado el barco de la escuela. Es hora de que nuestros niños y niñas naveguen sobre todo y ante todo en el mismísimo mar de la vida, no solo para estudiarla, sino sobre todo y ante todo para vivirla y gozarla, y después no olvidarse de nosotros los docentes.
Si nuestros niños y niñas desean conocer algo, no les demos la espalda ni los dejemos sin respuesta, y cuando llegue el fin de curso, que el año no sea un puerto aburrido de aguas estancadas y no olvidemos nunca cómo seremos en mares agitados.
Hay que enseñarles que el alcohol y las drogas son semillas de la muerte. La vida es el mayor don que Dios nos ha dado y por ser don de Dios está vinculado ineludiblemente al amor. Nuestra vida es fruto del amor, enseñemos con amor y seriedad, pero sobre todo con vocación, no por ocasión.
Rememos siempre hacia el bien y luchemos contra la corriente. Vendamos al mercado de la vida nuestra imagen de felicidad y lancemos en ella nuestros mejores frutos. De nosotros depende”.
A lo paraguayo porte, nos despedimos una y otra vez, pero seguimos charlando. El profesor Agripino insiste en que espera que esta no sea nuestra primera y última visita, tal como las promesas vacuas de cada lustro, por lo que me veo obligado a comprometerme a regresar.
Además de la humildad y la timidez, la escuela Banco’Yparaguaymi se caracteriza por su profunda devoción católica. Amén de las primeras letras y las operaciones matemáticas básicas, el profesor Agripino instruye en la fe, pues la misma precariedad de recursos hace que en muchas ocasiones no quede más opción que delegar algunas tareas a la buena de Dios.
CARIDAD
Antes de cerrar estas líneas, googleo sobre el significado de la caridad cristiana, que según la página oficial del Vaticano es la “virtud teologal por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas por Él mismo y a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor de Dios”.
Pienso entonces que –aunque no creo en Dios, amo a mi patria (¿y cuál es la expresión viva de esa entidad abstracta a la que llamamos patria si no quienes viven en ella?). Esto me hace concebir que sería un bello acto de humanidad y patriotismo ir el venidero Día de los Reyes Magos a obsequiar pelotas, útiles escolares, algo de vestimenta y calzados a estos pequeños compatriotas.
Después de todo quizás no todo está perdido o, en todo caso, como afirma Julio Cortázar, “nada está perdido si se tiene por fin el valor de proclamar que todo está perdido y que hay que empezar de nuevo”.