Continúa el conflicto instalado en el Mercado Municipal Nº 4 de Asunción debido a que los trabajadores se quejan del “operativo despeje”, que se encuentra haciendo la administración del mercado en horas de la madrugada para liberar el paso peatonal en los pasillos del citado mercado.

Los permisionarios cuestionan el proyecto impulsado por la dirección de Mercados de la Municipalidad de Asunción, refiriendo que los funcionarios presuntamente levantan, mueven y destruyen las pertenencias y mercaderías de los vendedores en el marco de este operativo.

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El objetivo del operativo es controlar que las casillas de los permisionarios estén dentro del límite correspondiente al espacio alquilado, pero los permisionarios se quejaron de que los funcionarios se llevaron sus mesas, que dejaron sus mercaderías todas desordenadas, algunas rotas y muchos dicen que están ubicados dentro del límite establecido.

“Llevaron mi mesa, estaba en la línea correspondiente y llevaron, dejaron tiradas todas mis mercaderías, como si fuese que me regalaron, a mí me cuesta plata conseguir mis mercaderías. Esta mesa que llevaron, yo quiero que el director me devuelva. ¿Por qué tocaron? ¿En qué les va a ser útil esa mesa? No sé para qué llevan”, dijo, visiblemente muy enojado, don Inocencio Paiva, permisionario en contacto con canal Trece.

Aseguró que encontró sus mercaderías tiradas por todos lados, hecho que ocasionó que se rompieran algunas mercaderías; de algunas de ellas, por el contacto con el suelo, se abrieron las envolturas, lo que representa un perjuicio económico importante para este humilde trabajador, quien además de exigir la reposición de su mesa, en donde exhibe sus mercaderías, exige respeto por parte de Villalba y sus funcionarios.

Paiva afirmó que un inspector avisó en la jornada de ayer sobre el “Operativo despeje” que se realizaría a partir de esta madrugada para que se respeten los límites correspondientes, por lo que dejó sus pertenencias y mercaderías totalmente ordenadas para que, justamente, no se toquen, pero se encontró con una sorpresa desagradable.

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