Este lunes, el doctor Guillermo Sequera destacó que la viruela símica o del mono es un virus conocido a nivel mundial, y se cuenta con vacunas y tratamiento, por lo que no crea una psicosis como la que se generó con el COVID-19. Indicó que las lesiones aparecen tres días después de los primeros síntomas y que estas son muy dolorosas.

“La viruela del mono es un virus conocido, ya en los años 70 se definió bastante bien, alguna particularidad tiene, pero es un virus que conocemos. Tiene vacuna y sabemos su nivel de mortalidad, sabemos cómo se contagia, entonces, creemos que eso hace que la expectativa o la incertidumbre que teníamos con el COVID no sea la misma”, dijo Sequera en el programa “Pase lo que Pase” de Universo 970 – Nación Media.

Según lo manifestado por le director de Vigilancia de la Salud, los síntomas de la viruela del mono inician a los 5 o 6 días después del contagio con fiebre, dolor de cabeza y dolor muscular, que hasta ese momento puede confundirse con dengue, influenza, COVID u otra enfermedad. “Luego aparecen los ganglios que pueden estar en el cuello, la ingle y dos o tres días después las lesiones o ampollitas que tiene la particularidad que duele”, detalló.

Agregó que cuando aparecen las lesiones es cuando las personas van a consultar, según datos brindados por los profesionales de la salud de los países donde ya se cuentan con casos de virus. “Nos dicen los colegas que la gente va a consultar por las lesiones, que no son diseminadas por todo el cuerpo en algunos casos. Aparecen en la zona peri genital, pubis, boca, cara, pero son pocas lesiones entre 6 a 10 ampollas”, relató.

Manifestó que estas ampollas duran una dos a tres semanas en promedio y que son lesiones que se ulceran, pero son muy contagiosas. “Estas lesiones deben mantenerse tapaditas, limpias y los más seca posible. Si se cuidan bien estas lesiones desaparecen, pero si la persona está manipulando o poniéndoles líquidos raros y tiene contacto con alguna bacteria o virus, sí pueden dejar lesiones permanentes”, confirmó.

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En otro momento, Sequera resaltó que la forma más común de contagio es la vía sexual y que se debe tener mucho cuidado con eso. “Más del 90% de los casos que estamos viendo se ha contagiado de manera sexual, pero no necesariamente quiere decir que sea una enfermedad de transmisión sexual”, aseguró.

Explicó que no se trata de una ETS porque son las lesiones o ampollitas las que emiten el líquido que tiene una cantidad viral muy alta y que aparecen mayormente en zonas de los genitales, es ahí donde se contagian por el contacto. “Es el contacto de estas ampollas los que llevan al contagio, no tanto el acto sexual o coito en sí, si no que el contacto piel con piel”, dijo.

Remarcó que tanto el líquido seminal como la saliva contienen el virus, pero no mucho comparado con el líquido de estas ampollitas que luego de romperse liberan aún más. “Pero hay casos de personas que durmieron sobre las sabanas de personas enfermas, escenarios donde se comparten utensilios como compartir el tereré con personas que tienen lesiones en la boca”, resaltó.

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Por último, el profesional habló sobre la inmunidad en el caso de contar con las vacunas, especialmente las personas nacidas antes de los años 70 y que sería imposible que a nivel país todos tengan una especie de inmunidad. “Es cierto que las personas vacunadas con la viruela en su momento los nacidos antes de ese año principalmente, son personas que al tener esta vacuna están inmunizadas por la viruela humana y del mono”, indicó.

Expresó que los mayores de 50 años posiblemente no tendrán problemas con esta enfermedad no así los menores de 40 años, quienes están expuesto e instó a que no tengan miedo de consultar si tiene síntomas muy marcados. “Por eso habilitamos el chat donde un es autónomo y se conecta, puede enviar una foto para realizar la consulta, y ya será atendido ahí”, puntualizó.

El doctor instó a la ciudadanía a no esconder la enfermedad y en el caso de presentar síntomas parecido a la de la viruela no tener miedo en consultar para descartar cualquier enfermedad. Las recomendaciones es seguir con el lavado de mano, en el acto sexual tener una buena comunicación con la pareja y la sinceridad. “Las lesiones son fundamentales creo que con esto solucionamos el 90% y el motor de esta epidemia está relacionada con la actividad sexual”, concluyó.