Este lunes 15 de agosto, Asunción, la capital de la República del Paraguay, cumple 485 años de su fundación. La creación del fuerte que daría vida a la ciudad se llevó a cabo en el territorio de los carios, una de las tribus guaraníes que ocupaban la región.

Para remontarnos un poco en el tiempo, La Nación contactó con el historiador y docente Herib Caballero, quien recordó que hace 485 años se funda el fuerte por el capitán Juan de Salazar y Espinoza, un joven militar integrante de la expedición de Pedro Mendoza, quien vino a esta tierra con la información de que había un gran reino de plata, una gran sierra de la plata de un rey blanco, que se refería a los incas.

“En el marco de ese proceso de ocupación y conquista de este territorio, Juan de Salazar aprovecha la hospitalidad de los carios, la cual no era tampoco inocente, ya que estos buscaban un aliado en su guerra con los guaicurúes, que son los indios del Chaco. Ahí es que se funda esta fortaleza y prácticamente dos años después los carios están arrepentidos de esa decisión porque los españoles cada vez les demandaban más trabajo, más producción de alimentos para sostener a toda la guarnición que iban ocupando y que después del despoblamiento de Buenos Aires se trasladó hasta Asunción”, resaltó.

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Herib Caballero, historiador y docente. Foto: Nadia Monges.

Caballero señaló que una vez que los españoles se consolidaron en Asunción, comenzaron los proyectos para tratar de encontrar ese camino a la sierra de la plata. “Ese periodo se llama las ‘malas entradas’ porque entraban mal o en tiempos de mucha inundación. Por lo tanto, no lograban el camino hasta que finalmente en 1547, bajo el mando de Martínez de Irala, llegan a Bolivia, al Alto Perú, y se encuentran ya con la desagradable sorpresa para ellos de que los indígenas les saludan en español, lo que significa que los españoles que vinieron con Pizarro por el norte ya habían logrado conquistar esos territorios”, relató.

Fue a partir de ahí que empieza todo el debate entre los conquistadores ante el “¿qué hacer?”. Si bien algunos optaron por ir al Perú, donde había plata y oro, otros dijeron no y volvieron al Río de la Plata, ya que ahí eran los señores.

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“Fue cuando empezó un proceso que hacia más o menos 1560 el grupo que quería conectarse por lo menos con el Perú, que estaba encabezado por Ñuflo de Chaves, entonces funda Santa Cruz de la Sierra, Nueva Asunción, que hoy está desaparecida en el Chaco. Otro grupo encabezado por Ruiz Díaz de Melgarejo tiene informaciones de que posiblemente haya oro hacia el Guairá, que no es donde hoy está en el Yvytyruzú, sino el original estaba en el estado Paraná en Brasil, entonces ahí fundan Villarrica, después se funda la ciudad real del Guairá, Ontiveros”, agregó.

Finalmente, ya a fines del siglo XVI, prácticamente después de casi 20 años, la idea es retomar el contacto con la península, según el historiador. “Ahí vuelven a fundar Buenos Aires, Santa Fe, Corrientes, como para ir estableciendo posiciones en todo el territorio y asegurar el camino fluvial hacia la península. Entonces por eso quedó el nombre de madre de ciudades porque fue un enclave en el medio del subcontinente sudamericano que permitió ir ocupando territorio de lo que sería sur de Bolivia, norte y centro de Argentina y lo que hoy sería el sur de Brasil”, sostuvo.

La Catedral se tuvo que reconstruir en más de una ocasión por los raudales, el deterioro de los materiales no contribuían a que se hagan edificios más perennes, como el caso de otras ciudades como Lima, Bogotá y México. Foto: Archivo.

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Asunción siempre fue un punto de referencia en una zona periférica del imperio español para detener el avance portugués. Fue una ciudad que sufrió el tema de las limitaciones de dinero al estar en una zona periférica, explicó el entrevistado.

En este sentido, habló de los edificios y dijo que incluso los públicos no eran muy duraderos. “El mejor ejemplo es que la iglesia Catedral se tuvo que reconstruir en más de una ocasión por los raudales, el deterioro de los materiales no hacía que se hagan edificios más perennes, como el caso de otras ciudades como Lima, Bogotá y México. Eso hizo que los recursos sean bastante limitados”, subrayó.

Asunción, por ese motivo de estar en la periferia y casi aislada, desarrolló rápidamente un sentido de identidad muy interesante. De hecho, algunos gobernadores españoles la denominaban como un “agente levantista” y rebelde a determinadas medidas de la metrópoli española.

Prepararse para los 500 años

El entendido en la materia si de historia se trata, indicó que Asunción desde 1541 se convirtió en ciudad cuando se establece el Cabildo. “Es la ciudad más antigua que hasta hoy en día existe en el Río de la Plata, de toda esta región. Creo que esto tiene que llevar al compromiso, tanto de las autoridades como de los habitantes de la ciudad, a ir preparando lo que van a ser los 500 años de la ciudad, dentro de 15 años”, enfatizó.

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