El objetivo de tener una fecha como recordatorio para conmemorar el Día Mundial del Cáncer de Cabeza y Cuello es para concienciar a la población sobre las acciones de prevención y control para una detección temprana de estas patologías.
Por eso, cada 27 de julio, desde el departamento de Cirugía y Cabeza del Instituto Nacional del Cáncer (Incan) se destaca la importancia de esta fecha a la hora de prevenir y detectar a tiempo este tipo de cáncer.
“Los cánceres de cabeza y cuello pueden localizarse en la nariz, los labios, la boca, la cara, las glándulas salivales, la glándula tiroides, huesos, músculos y piel del área, el cuero cabelludo, la garganta o la laringe, el ojo, las encías, la mandíbula y el maxilar superior’', expresó el doctor Hernán Ortiz, jefe del departamento de Cirugía de Cabeza y Cuello.
Causas
En cuanto a las más comunes que lo producen, citó el consumo de tabaco en cigarrillos o mascado en hoja (naco), la excesiva ingesta de alcohol y el virus del papiloma humano - VPH (de transmisión sexual en prácticas de sexo oral sin barreras de protección).
Así también, la mala higiene bucal y la mala condición de dientes e, igualmente, la ingesta habitual de mate y otras bebidas calientes.
Síntomas
Ortiz mencionó que ante los signos de sospecha de cáncer de cabeza y cuello se debe prestar atención, especialmente si persisten por más de tres semanas y no hay mejoría. Recomendó que ante alguna manifestación de cualquiera de los síntomas es fundamental consultar con el especialista en otorrinolaringología y cirugía de cabeza y cuello.
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Explicó que el tratamiento depende del estadio, locación de la enfermedad y del estado general de salud del paciente. Si se detectan a tiempo, son curables.
Entre los síntomas refirió dolor de garganta y dificultad al tragar, dolor de oído que empeora al tragar y tumefacción o úlcera en la boca.
Señaló también la expulsión de sangre desde la boca y la garganta, obstrucción nasal y/o sangrado nasal, así como lesiones blancas o rojas en la boca.
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Agregó además cambios en la voz como disfonía o afonía no relacionada con una infección, aparición de bultos en el cuello, sobre todo si son duros. Y dificultad respiratoria con estridor (es el ruido agudo que se produce al inspirar).