Productos frescos a base de frutos del bosque chaqueño y alimentos con estos ingredientes autóctonos, fueron compartidos este viernes en el centro de Asunción a través de mujeres emprendedoras indígenas y rurales del Chaco Paraguayo junto con facilitadoras de la Asociación Sombra de Árbol y otros aliados.
En una tienda ubicada sobre la calle Fulgencio R. Moreno hablaron del proceso que conlleva la producción de los insumos y sobre su expectativa de que se conozcan y consuman más. La actividad se dio en Espacio Samu’u de Asunción. Desde las voces de algunas de las protagonistas representantes de las 80 mujeres que integran la red, se pudo conocer historias y aprendizajes en el marco del proyecto “Mujeres Chaqueñas en Red: nuestro bosque, nuestros saberes y el futuro en nuestras manos”.
Pertenecientes a las aldeas de Samaria y Jope de la comunidad Yalve Saanga (Pueblo Indígena Nivaclé), la comunidad Ñu Guasu (Pueblo Guaraní Ñandeva), así como a la zona rural de Pozo Hondo, las emprendedoras dieron a conocer lo que hacen y alentaron a que más personas puedan valorizar las exquisiteces que trabajan con sus propias manos.
“El proyecto nos brinda muchos beneficios, como alimentos nutritivos y saludables para consumir y para la venta. Experimentamos el resultado del trabajo como la elaboración de la harina de algarroba. Queremos seguir luchando a pesar de las dificultades del mundo como la sequía y los problemas de salud”, expresó Rogelia Pérez, de la aldea Samaria, del pueblo indígena Nivaclé.
Los productos que elaboran son harina de algarroba, café y mermelada de mistol, en tanto que parte de su producción comercializan con la empresa Tucosfactory, que forma parte también de la red de trabajo y que ofrece al mercado estos insumos, sumado a la mermelada de tuna, ají del monte, galletitas de algarrobo, y otras variedades.
Cabe destacar que uno de los objetivos centrales del proyecto es fomentar la valoración y el manejo sostenible de los recursos naturales del Chaco, con énfasis en los algarrobales, y otras especies con frutas silvestres de la región, apoyando iniciativas lideradas por mujeres con innovación e inclusión social.
“Este proyecto es demasiado grande para nosotras, porque nos ayuda a recuperar nuestra cultura a través de la recolección del algarrobo. Hoy les traemos la harina de algarroba, resultado de todo este proceso que pudimos lograr gracias a todo el apoyo que recibimos en todo momento”, dijo Fátima Arias, una de las referentes indígenas de la comunidad Ñu Guasu.
¿Dónde comprar sus productos?
Los productos se venden en Samu’u Tiendita, situada en Caballero 773 casi Fulgencio R. Moreno y en Loccom, ubicada sobre las calles Santísimo Sacramento 1.573 casi Prof. Cesar Samaniego. O bien, directamente, sobre el café de mistol con Verena Friesen: (0981)176046; harina de algarroba, ají del monte y mermelada de tuna con Rogelia Pérez: (0982) 515710, Fátima Arias: (0984)735845 o Adeline Friesen: (0981) 114655.
La iniciativa es ejecutada por la Asociación Sombra de Árbol en alianza con otros actores locales y cuenta con el apoyo del Programa de Pequeñas Donaciones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).