La Fiscalía imputó a 9 cabecillas de las barrabravas del Sportivo Luqueño por perturbación a la paz pública y resistencia luego de la batalla campal a pedradas ocurrida en las afueras del estadio del club Pettirossi, ubicado en Cambyretá, en el departamento de Itapúa, ante Guaraní de Trinidad.
Agentes de la Policía Nacional detuvieron a 9 jefes y a 68 integrantes de las barras organizadas Chancholigans y La Barra de Luqueño, que volvieron a protagonizar hechos de violencia después de ser suspendidas por ocho meses por la Asociación Paraguaya de Fútbol (AFP) tras un partido en Atyrá por la División Intermedia ocurrido meses atrás.
Los imputados por perturbación de la paz pública y resistencia son José Mareco, Pedro Acosta Sanabria, José Gaona, Richard Palacios Caballero, Luis Enrique Medina Martínez, José Miguel Allou Antúnez, Lucas Ramón Giménez Giménez, Elos Gabriel Medina y Juan Sebastián Gaona. Dos policías fueron heridos en medio del tumulto registrado antes del inicio del partido detrás de una de las graderías del recinto de fútbol.
Todos los violentos hinchas del descendido club de la Primera División a la Intermedia, en diciembre del año pasado, fueron identificados en la participación de la turba ocurrida en el lugar a través de filmaciones viralizadas en redes sociales, en las que se observan los disturbios generados y la agresión al personal policial.
Los procesados quedarán a cargo de la Fiscalía, mientras que el resto de los apresados fueron liberados y se trasladaron desde Encarnación hasta Luque en medio de un fuerte dispositivo de seguridad. Otro grupo de barrabravas fue demorado tras solicitar dinero a los ciudadanos en la zona de la Costanera de Encarnación.