La ola de inseguridad y los hechos de violencia siguen siendo como el pan nuestro de cada día no solo en Central, sino a nivel país, pues cada vez son más los casos de asaltos, robos y asesinatos. “Esto nos obliga a las familias a vivir encerradas en nuestras casas y salir solo para ir a trabajar o en caso de urgencias”, dijo muy consternada una de las tantas víctimas de robo domiciliario en ciudad de Areguá.
En el barrio Santa Catalina de la fracción Lares, de la ciudad de Areguá, las familias son víctimas de constantes robos y anoche le tocó a Viviana Orrego, quien denunció que cuando volvió a su vivienda se topó con la desagradable sorpresa de que malvivientes ingresaron en su casa y se llevaron sus objetos de valor. “Todas las semanas hay robos, nadie se salva en nuestro barrio y la Policía no hace nada”, confirmó en contacto con La Nación/Nación Media.
Explicó que hace un tiempo se instaló un asentamiento detrás del barrio y que cada día ingresan más gente nueva, que aparentemente son los que pescan por las familias para poder ingresar a las viviendas a robar cuando ellas no están. “Ellos se instalaron en una colina y están más arriba, por lo que pueden ver todo lo que hacemos. Todos los días viene gente que no conocemos”, resaltó.
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Agregó que esta fue la primera vez que dejó su casa por mucho tiempo y lo hizo por un problema de salud, pero que su suegro venía a pasar el día y por la noche estaba su marido. “Esta vez, por problemas de salud, me vi obligada a pasar unos días en la casa de mi mamá y justo el día en que volví nos encontramos con la sorpresa”, lamentó.
Manifestó que en un par de horas que la casa quedó sola, los malvivientes aprovecharon para forzar la puerta y que aparentemente eran dos personas, una entró a sacar todo y que la otra esperaba afuera. “Había pisadas frescas en toda la casa y en el fondo había otras pisadas. Se llevaron un televisor Samsung 32, un parlante, una placa, una frazada y una caja de herramientas”, indicó.
Aseguró que lamentablemente, pese a las reiteradas denuncias de robo que se da a la Policía Nacional, los efectivos nunca realizaron ningún tipo de patrullaje en la zona, por lo que dejan a su suerte a los vecinos que son víctimas de este tipo y otros hechos delictivos. “Estoy con mucha impotencia y rabia porque somos una familia nueva que con mucho sacrificio compramos lo que tenemos y nos hacen esto. Mi hija ahora llora porque quieren ver la televisión y solo teníamos una”, lamentó.
Cabe destacar que Viviana lanzó una alerta en redes sociales donde denunció el robo y pidió ayuda para dar con sus pertenencias, ya que los malvivientes generalmente vuelven a vender por la zona. Ella está dispuesta a recuperar los objetos robados, ya que con la situación que pasamos a nivel país es difícil volver a comprar todo. “Como todos tengo varias deudas y hace poco compramos para nuestra casa, por lo que nos va a costar volver a comprar todo de vuelta”, concluyó.