La hermana Graciela Ponce denunció hace unos días la indignante situación en la que viven indígenas de unas cinco comunidades de San Rafael, departamento de Presidente Hayes, y de la cual se hizo eco La Nación, que publicó la información en portada. Tras lograr una ayuda para ellos, señaló que expresaron mucho agradecimiento, pero apuntó a que se demostró la falta de voluntad política para los nativos de la zona.
En comunicación con La Nación, Ponce explicó que los indígenas se sintieron muy contentos por el hecho de que volvieron a visitar la comunidad en menos de 15 días y con una ayuda bastante importante. En esta ocasión, pudieron llevar al menos 5.000 litros de agua potable para todos los integrantes de al menos cinco comunidades que experimentaban la falta del líquido vital desde hace mucho tiempo.
“Ellos súper contentos de que en 15 días fuéramos con otra ayuda aunque sea poco para la cantidad de gente y la necesidad que hay, pero por el hecho de que volvamos para ellos ya fue una emoción grande. Lo que nos sorprendió y de manera grata es que nos prepararon unos bailes típicos los niños del colegio de allí”, indicó la hermana.
Expresó que la entrega que realizaron, si bien es importante para todos, es un grano de arena para toda la necesidad que existe debido a que estima que son más las comunidades que están enfrentando esa misma situación. En ese sentido, indicó que pudieron terminar de comprobar de que falta mucha gestión y voluntad política para poder solucionar el problema de los indígenas de esta comunidad.
Donaciones
Ponce señaló que mediante la Pastoral Social Diocesana de Asunción, quienes realizaron las gestiones para poder recibir la ayuda de parte del sector privado, se pudieron conseguir los 1.000 botellones de cinco litros de agua pura que fueron traslados hasta las comunidades a fin de entregar de acuerdo a la necesidad de cada familia. “Que ellos reciban esas botellas de agua transparente para ellos era una novedad porque no ven agua hace mucho tiempo”, mencionó.
Del total de donaciones, Bebidas del Paraguay participó con 300 bidones de cinco litros, pudiendo de esa manera ampliar la cantidad, que según indicaron, fueron trasladados por personal de las Fuerzas Armadas. Ponce aseguró que es de suma importancia la colaboración del sector privado para estas comunidades que viven en situaciones indignantes ante la falta de compromiso de las autoridades.
Aclaró que en todo el país se logró una repercusión bastante importante de la denuncia, lo que derivó en este hecho solidario mediante el cual se logró la entrega de esta cantidad de agua a los indígenas. Sobre ese punto, sostuvo que varias personas de la zona de Horqueta, departamento de Concepción, hicieron entrega de alimentos y abrigos para las familias necesitadas.