El fiscal Andrés Arriola señaló este miércoles que hubo negligencia en la cárcel de Tacumbú en la fuga del interno Salvador Martínez Bazán y la muerte del reo Rubén Meza, que habría sido por “una cuestión disciplinaria” del clan Rotela. Hasta el momento no hay ningún imputado por lo ocurrido.
“Estamos en etapa investigativa y también vamos a centrarnos en los guardiacárceles, no podemos decir que tienen responsabilidad pero sí una negligencia brutal. Todavía no hay guardiacárcel alguno imputado porque quiero identificar bien con nombres concretos para proceder a una imputación responsable”, dijo el fiscal en comunicación con la radio 1020 AM.
Sostuvo que la investigación sobre la fuga de un interno y la muerte de otro está todavía en etapa incipiente, por lo que está tomando todos los recaudos para confirmar o descartar la complicidad de los agentes penitenciarios en ambos hechos.
Arriola indicó que todos los elementos están siendo tenidos en cuenta para aclarar lo ocurrido en la penitenciaría de Tacumbú porque hay varios frentes de investigación e insistió en que todos los responsables serán imputados por el Ministerio Público, tanto de la muerte de uno de los reos y la fuga de otro.
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“Surgieron un sin fin de rumores, pero sí tenemos algunos indicios no cabe duda que voy a imputar a los responsables. Hay sospechas de que otro de los que querían rescatar al señor César Ramón Ortiz, alias Gordito Lindo, está involucrado en casos de sicariato. Hay evidencias incautadas como varios celulares que podrían tener cuestiones importantes”, agregó el agente del Ministerio Público.
El interno encontrado muerto en el penal de Tacumbú fue identificado como Rubén Meza habría sido asesinado por una “cuestión disciplinaria” del clan Rotela y el fugado es Salvador Martínez Bazán, integrante de dicha organización criminal.
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