Este domingo se conoció la extraordinaria noticia de que Paraguay cuenta con su primer cardenal, luego de que el papa Francisco adelantara el nombramiento de monseñor Adalberto Martínez, arzobispo metropolitano. En la ocasión, el santo padre anunció un consistorio que se llevará a cabo el 27 de agosto para el nombramiento de los 21 nuevos cardenales, entre los que se encuentran un paraguayo, dos brasileños y un colombiano, además de otros cardenales representantes de varios países a nivel mundial.

Al respecto, el periodista católico Pedro Kriskovich mencionó a La Nación/Nación Media que es una gran fiesta para la Iglesia. “Un día de gracia, un día tan esperado e histórico en que el papa Francisco ha informado el nombramiento de un nuevo cardenal ante los 21 cardenales que designó, 20 electores, uno que tiene ya más de 80 años y no es elector, está nuestro querido monseñor Adalberto Martínez”, expuso en contacto con nuestro medio.

Agregó que va también en sintonía con lo que el papa Francisco ha pedido para la Iglesia: una Iglesia en salida, que pueda llegar a las periferias sociales y existenciales a lo que vive el mundo de hoy. “Estamos en un tiempo especial, después de una pandemia terrible que azotó al mundo, con las guerras, es como que la Iglesia no tiene que olvidar su misión de Cristo presente en el mundo a través de la Iglesia y sus pastores. En el caso del monseñor Adalberto, un pastor con olor a oveja como pide el Papa, con mucha cercanía a la gente”, aseguró.

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Foto: Jorge Jara.

Humildad y cercanía

Kriskovich refirió que después de la pandemia han quedado muchas heridas sociales, emocionales y conforta saber que el monseñor Adalberto siempre ha sido nuestro arzobispo, ha sido obispo auxiliar de Asunción, responsable de las comunicaciones sociales, obispo de San Lorenzo, obispo castrense, obispo de Villarrica del Espíritu Santo, donde conoció la vida de Chiquitunga, “pero sobre todo un pastor que está cerca de la gente y más que nunca la gente necesita esta cercanía, esta humildad”, resaltó.

En otro momento, manifestó que el Papa decía también en su mensaje a los cardenales, “ustedes son príncipes de la Iglesia, pero recuerden que son príncipes de un rey que fue crucificado como es Jesucristo. La humildad va a prevalecer siempre, monseñor es una persona humilde y va a estar muy cerca de la gente”, enfatizó.

El periodista católico explicó además que la designación del cardenal es una potestad totalmente del Papa y que todo cardenal es una persona cercana y colaboradora del Papa. “Puede elegir papa o ser elegido papa, pero la misión es la misma como pastores, obispos, con la única diferencia de que hay una mayor cercanía al papa Francisco en las relaciones, los encuentros que periódicamente el Papa propone. Pero se abre también esa posibilidad de haber sugerencias o mayor conocimiento, pero siempre las decisiones finales corresponden al Papa”, apuntó.

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Esperanza

Igualmente, señaló que la Iglesia puede transmitir esperanza aún en medio de todos los límites que el factor humano, que la Iglesia pueda tener en recuperar la esperanza y que la Iglesia a través de sus pastores y los laicos también puede ayudar a la gente a sostener la esperanza que es lo que se necesita ahora en estos tiempos tan difíciles.

“La Iglesia tiene que trabajar sobre ese aspecto y recuperar la fe, esperanza, esa es su misión y va a ser siempre en cualquier coyuntura, circunstancia, y más aún en la que estamos viviendo ahora”, subrayó.

El entrevistado comentó además que los cardenales aparte de ser electores de los papas, la misión de los mismos es la de ser los más estrictos colaboradores del Papa en el guiar a la Iglesia. “Visten de rojo porque están dispuestos a dar la sangre, la vida por amor a la Iglesia”, puntualizó.

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Anécdota

Así también, Pedro dijo que el monseñor Adalberto siempre fue cercano a los laicos. “Estudió como laico, fue estudiante de economía en los Estados Unidos y siempre cuenta como anécdota que trabajaba lavando platos y después ascendió lavando ollas, para pagarse sus estudios. Conoce la realidad del trabajo y fue migrante en EEUU. Decidió volver al Paraguay, se ordena en la parroquia Sagrado Corazón y ahí empieza todo ese camino, es profesor de la pastoral de la comunicación con Caritas en los años ‘90″, agregó.

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