Usuarios y padres con hijos con discapacidad auditiva reclaman una excesiva demora en cuanto a la entrega de audífonos por parte de la Secretaría Nacional por los Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad (Senadis). Se trata de las denominadas ayudas técnicas que también incluyen prótesis, silla de ruedas, bastones o muletas que los afectados precisan para tener una mejor calidad de vida.

Lamentan estar a la espera desde hace más de dos meses por un audífono que en principio la persona que padece afecciones como hipoacusia o sordera brusca recibiría en 30 días. Aseguran que se trata de elementos que son de utilidad para las actividades diarias y en consecuencia para acceder a una mejor calidad de vida por parte de adultos mayores, adultos, jóvenes y adolescentes.

En ese sentido, la institución cuenta con 500 ciudadanos en lista de espera que solicitan este tipo de aparatos, en tanto se hace entrega de 5 a 10 audífonos por semana, quedando una gran cantidad de afectados con los que no pueden cumplir por falta de recursos. Las personas que realizan el pedido de mejoras en la asistencia temen quedar sin los dispositivos, por lo que prefieren mantener el anonimato, en el reclamo realizado también en nombre de otros usuarios en la misma situación.

“La necesidad supera mucho más de lo que nosotros podemos dar. Tenemos una lista de espera de más de 500 usuarios con esa necesidad y nosotros estamos dando prácticamente 5 a 10 audífonos por semana. Los pedidos van aumentando diariamente entonces estamos trabajando por prioridades”, expresó el doctor Rodrigo Franco Bisso, director de Protección y Rehabilitación de la Senadis.

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El profesional señaló que la provisión de audífonos se realiza periódicamente y si se registran demoras se debe a falta de stock, falta de presupuesto o por cuestiones administrativas como los llamados a licitación, que por su excesiva burocracia demoran aún más la entrega de los dispositivos a los usuarios de la Senadis.

“Están saliendo a medida de lo que nos da el presupuesto, pero queda muy corto con relación a la necesidad del país. Estamos hablando de más del 10% de la población del país que tiene algún tipo de deficiencia o discapacidad. La mayoría necesita de lentes, prótesis, silla de ruedas o muletas para mejorar su calidad de vida. Realmente no damos abasto. Es administrar una necesidad muy alta con tan poco presupuesto”, afirmó Franco Bisso.

Precisó que la institución se cuenta con un equipo multidisciplinario de entrega de audífonos que de acuerdo a la gravedad del caso se considera prioridad y tiempo de entrega de los dispositivos. Hay que recordar que se trata del único ente del Estado que otorga audífonos de manera gratuita a la población en vulnerabilidad.

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“Por ejemplo, una persona de 12 años que está en la escuela tiene prioridad A. Se le va a dar más rápido un audífono que a una persona que tiene más de 80 años con hipoacusia. Desde el punto de vista social se dan las prioridades, entonces esa persona tiene prioridad C y va a tardar más”, manifestó Franco Bisso en contacto con La Nación - Nación Media.