Un “secreto familiar” truncó su infancia, nunca fue una niña normal, los psicólogos de la escuela notaron en ella comportamientos raros, llamaban la atención a la familia, pero de eso no pasaba. Pasaron los años y viendo que estaba quedando impune todo el daño que le hicieron durante su niñez, Andrea Pintos rompió el silencio y a través de redes expuso a tres personas que abusaron de ella de forma sistemática y producto de ello, incluso quedó embarazada.
Desde los cinco años, cuando falleció su madre, Pintos era abusada por su hermano que en ese entonces tenía 15 años. Años después fue entregada a su tía materna, allí se encontró con su primo que es siete años mayor que ella y quien también empezó a abusar de ella, ya que era la huérfana, la que no tenía quien la defienda, su primo se hizo su protector a cambio de guardar silencio.
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Desde la adolescencia, empezó a practicar formas para quitarse la vida. Afortunadamente, todas fallaron y hoy puede denunciar la situación para que el hecho no quede impune. Este hecho generó molestias en su tía materna quien siempre la trató de “problemática”, por lo que a los 15 años la entregó a su hermano, su primer abusador.
Su hermano mayor la recogió en su casa, la tiró a una pieza donde estaba su padre y éste empezó a abusar de ella. Según relata, su padre le exigió mantener relaciones sexuales con él a cambio de no traer otra mujer al cuarto donde vivían. Esto, continuó hasta sus 18 años, cuando quedó embarazada de su papá, lo denunció en la comisaría, pero nunca trascendió a la Fiscalía por las amenazas de toda su familia.
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Ahora, a través de los grupos de Facebook y otras redes sociales expuso a sus abusadores Patrocinio Pintos, su papá; Juan Carlos Pintos, su hermano; y Sergio David Peralta, su primo. Patrocinio ya se encuentra detenido por la Policía Nacional, mientras que su hermano y primo cuentan con orden de captura pendiente por el mismo caso.
“La terapia me ayudó a entender que no es mi culpa por eso decidí hacer justicia por mi porque ellos no dejaban de molestarme. Mi mensaje es que si no se animan a denunciar busquen ayuda psicológica y eso les va dar valor de denunciar mientras no se tratan van a estar en depresión como yo o pueden acabar suicidándose como yo lo intente varias veces”, dijo Pintos a La Nación-Nación Media.
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