El padre del cadete supuestamente torturado en la Academia Militar (Acamil), Rubén Medina, señaló este lunes que su hijo quedó traumado por los maltratos sufridos y lamentó que se haya cambiado la carátula de la investigación sobre lo ocurrido y reiteró que los altos mandos militares buscan hacerle callar a la familia.

“Mi hijo no está muy bien, quedó con unos traumas psicológicos, no quiere salir a la calle por ejemplo. La causa está caratulada como tortura y cambian a investigación sobre tortura nada más”, cuestionó el padre del cadete supuestamente torturado, en comunicación con la radio 650 AM.

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Sostuvo que es preocupante la situación de su hijo porque quedó mal por los maltratos sufridos e insistió en que los altos mandos militares quieren hacer callar a la familia por las denuncias realizadas, ya que supuestamente el objetivo es que el caso quede en la nada.

Medina indicó que a su hijo le magullaron la cabeza con los famosos “palitos chinos” y que a casi todos los cadetes se les hace lo mismo en la Academia Militar, pero nadie se anima a presentar las denuncias por temor a represalias y por el supuesto encubrimiento de los altos mandos de la institución castrense.

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“Dejamos constatado que mi hijo tenía rastros de torturas, tenía chichones en la cabeza y deformada. Le hacían tomar 6 litros de agua y después le ponían en forma de trípode para hacerle vomitar. El contexto de ellos es para reforzar el espíritu. Altos mandos militares quieren hacernos callar”, agregó el padre.

Los familiares del excadete temen por represalias por las denuncias realizadas sobre las torturas y piden protección a los organismos del Estado. La presunta víctima de los maltratos fue expulsada de la Academil en el mes de marzo pasado, tras ser acusada por un presunto caso de hurto.

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