La Directora Ejecutiva de la Dirección Nacional de Defensa, Salud y Bienestar Animal, Teresita Álvarez, recibió la visita de Loiken Knöpfelmacher, conocida como la Doctora Mykurê. El encuentro fue a fin de coordinar acciones para un plan a nivel nacional de protección a estos animales.
“Me fui a la Dirección de Bienestar Animal para proponer el proyecto de protección a los mykurê, les pareció genial, se sumaron enseguida a la causa y yo me ofrecí para generar conciencia y hacer una campaña más fuerte en todo lo que tiene que ver al tema de proteger a los marsupiales”, dijo Knöpfelmachera a La Nación - Nación Media.
La especialista pretende que la campaña se realice a nivel nacional y hacer también convenios con las municipalidades a fin de que se respete a estos animales. “En todos se va generando conciencia poco a poco de cuidar a los perros, gatos, pero la zarigueya en ese sentido es el animal más satanizado y maltratado y hay que ver la forma de cambiar esa mentalidad”, manifestó.
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La Doctora Mykurê, quien es conocida de esta manera en sus redes sociales (doctoramykure), adelantó que va a iniciar una fuerte campaña con videos en redes sociales y así también se tiene previsto visitar escuelas y colegios. “Se van a hacer visitas a escuelas, voy a ir con una de mis zarigueyas que es muy noble, muy educadora y la gente se sorprende al ver una zarigueza tan de cerca y ahí se da cuenta que tan errada estaba su expectativa sobre ellas, hay gente que ni siquiera las ve de cerca y se deja llevar por los comentarios, inclusive se sorprenden que ni siquiera tienen mal olor como se dice”, mencionó.
No pueden portar rabia
“Tenemos muchas ideas, mucho por conversar, esto surgió ahora, hace un par de días, entonces vamos a consensuar todas las propuestas y así poder llevar a cabo un buen plan, todos tenemos el objetivo de crear conciencia y erradicar el maltrato a la zarigueya”, dijo Knöpfelmacher.
Las comadrejas o mykurê son marsupiales, es decir, que poseen una bolsa en el área del vientre, donde alojan a sus crías, lo cual requiere de un cuidado especial al capturarlas o manipularlas. No son proveedores de la rabia ya que la temperatura corporal de las comadrejas es demasiado baja para el cultivo de la enfermedad, convirtiéndola en resistente.
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