Tras las recientes denuncias por torturas y violencia en la Academia Militar Mcal. Francisco Solano López (Academil), han salido más casos a la luz. La madre de una excadete contó lo que vivió su hija dentro de dicho cuartel.

“Cuando ella fue al hospital por primera vez, que fue el 19 de febrero, nosotros nunca tuvimos parte médica ni la declaración de alguien. En el primer ingreso a ella le dieron un reposo domiciliario, que en la academia no existe un reposo domiciliario, porque la academia es su casa. Nos presentamos a la academia, su papá, una hija y yo, fue donde nos enteremos lo que a ella le estaba pasando”, dijo Marcela López, madre de la cadete, a la 1080 AM.

La excadete informó al comandante Caballero que sufrió una agresión por parte de una cadete más antigua con el nombre y apellido. La víctima estaba con colitis en ese momento, pero continuó con sus deberes como cadete sin negarse a pesar de su condición. Con su mal estado de salud recibió un golpe en la frente por parte de la más antigua cuando se encontraba en el baño.

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Esto resultó en algo más grave, ya que la víctima luego del golpe cayó y quedó inconsciente; la misma recibió un fuerte impacto en la parte posterior de la cabeza. Luego fue trasladada al hospital de Capiatá, pero de allí la derivaron al Hospital Militar.

Luego llamaron a los padres. Según los médicos, la cadete estaba allí por un cuadro de anemia, lo que hizo que se descompensara y fuera internada. Sus padres fueron a verle y la joven no los reconoció.

“Ella se volvió a internar una segunda vez. Nos enviaron un mensaje donde indicaron que volvió a ingresar por el mismo problema, fuimos a encontrarle bajo esta situación. Me dijo ‘mami, yo no quiero volver, por favor no quiero volver’”, aseguró la madre.

Luego, los doctores indicaron que la situación de la joven era un problema mental y no una situación clínica. Los padres no estaban al tanto del abuso ni del maltrato que había experimentado la cadete hasta que ella les informó lo que le pasó. Por lo tanto, los padres exigieron a los médicos un informe.

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El comandante de la Academil, César Caballero, firmó un documento que indicaba que la excadete salió de la academia por problemas familiares, pero en realidad la joven se sentía muy presionada por la situación que vivía en la academia.

“Ella recibió la visita de la Defensoría porque había una denuncia anónima y lo que ella hizo fue confirmar lo que habían denunciado. Ella me dijo que le trataron en la academia de mentirosa, de inútil, que ella no estaba capacitada para la carrera y por lo que me dijo me atreví a hablar, hay muchas cosas que no corresponden”, aseguró la madre.

La excadete indica que no puede remediar cómo actuaron contra su persona. Actualmente la joven se encuentra en un cuadro depresivo, no quiere salir ni hablar con nadie. La madre, por su parte, llena de impotencia y llanto, indicó que solo está comentando la verdad de lo que vivió su hija.

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