Los propietarios del Paraná Country Club de Hernandarias volvieron a deslindar hoy viernes cualquier responsabilidad de obstrucción en el operativo en el que el narcotraficante brasileño Lindomar Reges Furtado logró escapar, y observaron algunos errores en el procedimiento del Ministerio Público y de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
Ambos organismos estatales divulgaron ayer un vídeo sobre el allanamiento que llevaron a cabo el martes pasado en ese complejo privado dentro de la Operación Internacional Turf, que buscaba la captura de Reges Furtado. De acuerdo a la comitiva antidrogas, la demora presuntamente deliberada durante 3 minutos del personal de seguridad de la entrada del condominio pudo haber sido aprovechada para el escape del criminal, que por una diferencia de apenas 45 segundos evadió a las autoridades en las calles de la propiedad.
El Consorcio de Propietarios del Paraná Country Club emitió un comunicado firmado por su directora jurídica, Vila Días Oliveira, para desmentir que se haya obstruido el ingreso de la comitiva de seis vehículos, que llegó al condominio a las 6:06 y a la casa de Reges a las 6:13, mientras este salió de su vivienda a las 6:12 y a las 6:25 llegó fuera del predio privado.
“Lo que nosotros quisimos hacer con ese comunicado es, básicamente, quitarnos un poco la responsabilidad de este operativo frustrado”, dijo el presidente del Consejo de Propietarios del Paraná Country Club, Carlos González, en entrevista con la radio Universo 970 AM.
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“Realmente, en esta oportunidad y de la forma en que se hizo el operativo, era muy difícil que la guardia de seguridad fuera la ‘campana’ como dicen ellos porque fue muy rápido (…). Evidentemente alguien cantó, no sabemos quién pudo haber sido, yo no descarto la posibilidad de que pudo haber sido un guardia, pero es bastante hollywoodense como se dice, de película, de que hayan sido nuestros guardias”, aseveró.
Errores de procedimiento
Dijo además que llama la atención que los encargados del procedimiento no previeron una situación como la posible fuga que se dio en este caso y que no habían dejado ningún vehículo de la Fiscalía ni de la Senad para cubrir los puestos de salida del barrio cerrado. Advirtió que tampoco recibieron hasta el momento la copia del oficio judicial de dicho allanamiento.
Mencionó que el Paraná Country Club debe ser visto como cualquier otro barrio donde podrían habitar delincuentes y que pese a que tienen registrados a todos los propietarios e inquilinos, se hace muy difícil saber quién entra y quién sale, ya que solo son controlados los titulares de las viviendas, que en este caso cuentan con una tarjeta especial de ingreso al lugar.
En ese sentido, dijo que la que estaba registrada y que contaba con esa tarjeta era la pareja de Reges Furtado, la paraguaya Gladys Duarte, quien también se fugó durante esa operación. “La señora Gladys Duarte sí tenía tarjeta de acceso como propietaria (…). Nunca ellos habían solicitado la tarjeta de acceso al señor Lindomar. Él no era inquilino ni estaba inscrito como socio regular. Si él entraba al Paraná Country Club entraba con su pareja, porque cuando uno entra con su vehículo solamente se registra la persona que entra con su vehículo, no los acompañantes”, explicó.
Podría seguir oculto en el complejo
Tampoco descartó que el brasileño prófugo podría seguir oculto dentro del Paraná Country Club, ya que las cámaras de seguridad no lograron captar el momento en que el mismo descendió de la camioneta en la que iba con su pareja, esta última que sí fue vista en los vídeos abandonando el lugar, a través del sector por donde poco antes habían ingresado las propias autoridades antidrogas.
“Nosotros lo único que decimos es que siempre estuvimos a disposición de los órganos judiciales y policiales para colaborar con todo tipo de allanamientos, lo que queremos realmente es limpiar nuestro barrio. Te aseguro que el 99,9% de la gente que vive en el Paraná Country Club es gente de bien y está muy preocupada por lo que pasó”, añadió.
En el marco de la Operación Internacional Turf, que se inició el martes pasado en simultáneo en países como España y Brasil y que cuenta con el apoyo de las autoridades estadounidenses y de la Europol, fueron arrestados en el Paraná Country Club los guardias de seguridad privados Miguel Paniagua Mello y Eusebio Cáceres Benítez, así como la brasileña Karla Andressa Guimaraes.
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