Un irregular procedimiento policial fue realizado en la ciudad de Villarrica por supuestos personales del departamento antinarcóticos, con sede en la ciudad de Coronel Oviedo. El procedimiento llevado a cabo por los antinarcóticos no fue comunicado a la comisaría jurisdiccional, lo que llamó la atención a los agentes que siguieron el caso.
Las sospechas apuntaron inicialmente a un posible caso de plantación de narcóticos por parte de estos agentes que realizaron el irregular procedimiento, en complicidad con una mujer, presumiblemente una trabajadora sexual, en perjuicio de un comerciante de la ciudad de Itapé, en el departamento de Guairá.
El agente antinarcótico llegó en horas de la noche hasta la comisaría de Santa Librada de la ciudad de Villarrica solicitando utilizar unas llaves para esposas y pretendiendo dejar en custodia una camioneta para que luego sea entregada a otra persona, innominada, según relató la agente policial Letizia Mazari, quien dio detalles de lo sucedido al programa “A punto”, emitido por canal GEN y Universo 970 AM.
No estaban informados
El hecho llamó la atención al personal policial interviniente, pues no estaban informados sobre ningún procedimiento en su sector, por lo que decidieron seguir al agente antinarcótico, identificado como Hugo Sanabria, quien regresó al lugar del supuesto procedimiento, situación observada desde la patrullera que realizó el seguimiento.
En un momento del seguimiento, tanto la patrullera como el vehículo conducido por Estigarribia coincidieron en una avenida de la ciudad de Villarrica y en el lugar se encontraba un tercer vehículo, del cual desciende otro supuesto agente antinarcótico, también con asiento en la ciudad de Coronel Oviedo y quien se identificó como Christian Figueredo.
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Citado por una mujer
Los dos agentes habrían intentado aprehender al propietario de la camioneta, quien fue citado por la mujer, identificada como Fiorella Martínez, y con quien se dirigían a un motel.
Siguiendo con la denuncia presentada por el comerciante, en el momento que los agentes antinarcóticos le cerraron el paso, Fiorella habría dejado su cartera conteniendo un toco de cocaína, dándose a la fuga, y quedó toda responsabilidad sobre el denunciante, quien presumiblemente cayó en estas prácticas comunes de mujeres trabajadoras del sexo en complicidad con personales de la Policía Nacional.
El comerciante fue esposado en un brazo y en un momento dado de forcejeos pudo escapar, corrió casi 4 kilómetros cruzando una pileta de desechos de la Essap y eucaliptales, llegó hasta una gomería a pedir socorro pidiendo ser llevado hasta la Comisaría Segunda Santa Librada de Villarrica; antes de que llegue el comerciante, uno de los policías, Hugo Sanabria, ya acudió a la comisaría solicitando llave de esposa porque tenían un aprehendido, pero lo que no había relatado y alertó a los personales de la comisaría fue que no comunicaron sobre sus procedimientos a la comisaría jurisdiccional y mucho menos a la Dirección de Policía.
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Ministro, ausente
La denuncia sobre este hecho fue elevada ante el agente fiscal de turno y la mujer quedó en calidad de demorada, mientras que los demás fueron puestos en libre circulación, pero los agentes antinarcóticos fueron puestos a disposición de la Dirección de Investigación Criminal.
Estos hechos de inseguridad que involucran a agentes de diferentes dependencias de la Policía Nacional se repiten con mucha frecuencia en los últimos meses, mientras que Arnaldo Giuzzio, responsable de la seguridad interna del país, desarrolla su propia agenda, lejos de las obligaciones para las que fue designado.