Durante la fiesta mariana más importante del Paraguay, que se celebra el 8 de diciembre, así como semanas previas, cumplir con los protocolos sanitarios es un compromiso de todos. De esta manera, se busca prevenir la propagación del COVID-19.

Al respecto, la viceministra de Rectoría y Vigilancia de la Salud, Lida Sosa, dijo que Caacupé será un gran desafío no solo para la Iglesia y el Ministerio de Salud, sino también para la ciudadanía. “Dependerá del peregrino que visita a la Virgen que lo haga de manera segura. Salud realiza recomendaciones y el protocolo, el compromiso es compartido entre todos, eso incluye a los organizadores y la población, hay que cuidarse”, apuntó.

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Indicó que los peregrinantes deben estar inmunizados contra el COVID-19, mantener la distancia de metro y medio, utilizar correctamente el tapabocas, realizar la higiene de manos, usar alcohol y no compartir mate, tereré ni alguna otra bebida.

En otro momento, Sosa señaló la importancia de aplicarse la vacuna anti-COVID para evitar la forma grave de la enfermedad, ya que previene que uno pueda internarse o fallecer. “Como vemos en las últimas estadísticas, la mayoría de hospitalizados y óbitos son los no vacunados; por eso, además de la vacuna, el uso de tapabocas y el lavado de manos son los que nos van a salvar”, enfatizó.

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En cuanto a un posible rebrote de la enfermedad, la profesional recordó que es fundamental el cuidado personal y que de todos modos el personal de salud está capacitado para hacer frente. Esto, teniendo en cuenta que el sistema sanitario se ha fortalecido con la incorporación de equipamientos, el número de camas, así como medicamentos e insumos.