El Ministerio de Salud Pública, en el marco de la campaña global “Noviembre Azul”, insta a la población masculina mayor de 50 años o con antecedentes familiares con cáncer de próstata a acudir al urólogo, para la detección temprana de la enfermedad que significaría reducir los riesgos de muerte. Esto debido a que el cáncer de próstata no suele dar síntomas al comienzo, por ello, la detección precoz es fundamental para iniciar un tratamiento oportuno.
El cáncer de próstata es el cáncer más frecuente en los hombres y suele presentarse al inicio de los 50 años o a los 40 años, cuando un familiar padeció dicha enfermedad. Existe mayor posibilidad de desarrollar la enfermedad cuando hay familiares directos que la padecieron.
En este sentido, acudir a los controles sanitarios es fundamental. El médico urólogo realiza un interrogatorio, orientado a detectar trastornos en la micción; es decir, hábitos urinarios, antecedentes patológicos familiares y personales. Posteriormente, efectúa un tacto rectal para conocer las características de la próstata y, por último, solicita los estudios que considere necesarios.
Uno de los controles es el análisis de sangre (antígeno prostático específico-PSA) que no es suficiente para la detección de enfermedades. Si bien es un buen marcador para los tumores de próstata, tiene cierto grado de falencia dando, en ocasiones, resultados falsos positivos; es decir, valor elevado sin la existencia de tumor; o falsos negativos, valor normal con cáncer de próstata.
La exploración médica tacto rectal es la única forma en que se puede revisar la próstata y es a través del recto. Mediante el tacto, el urólogo puede conocer las características de la glándula: el tamaño, la consistencia, la presencia de nódulos o durezas, etc. Se trata de una revisión no dolorosa, pero sí molesta que dura pocos segundos. Puede sentir intensos deseos de orinar, que ceden cuando finaliza el tacto.
Este control es variable y depende de factores que son identificados por el urólogo, quien determinará la frecuencia de los controles y explicará al paciente sobre esto. Sin embargo, se aconseja realizarlo a partir de los 50 años de forma anual y, a partir de los 40 años, en aquellos pacientes con antecedentes de cáncer en familiares.
Es importante que los hombres pierdan el miedo de acudir al urólogo, ya que podrían evitarse altos costos combatiendo la enfermedad en una etapa muy avanzada y hasta la muerte. Por lo que el Ministerio de Salud insta a tomar conciencia y acudir a los controles para cuidar la vida.
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