En semana saltó a la luz el caso de Enrica Locatelli, paraguaya que habría sido adoptada por italianos de forma ilegal en acuerdo con sacerdotes redentoristas hace 40 años en la ciudad de Pilar. Este fin de semana partió desde Italia el kit de ADN para que José Domingo Benítez, un hombre que se presentó como su hermano mayor, pueda someterse a las pruebas.
“Estamos 90% seguros de que somos hermanos. Hace tres días que no duermo, casi es muy fuerte esto”, dijo José Domingo en entrevista con un equipo de La Nación enviado especialmente hasta Pilar. Indicó que desde el primer contacto con Enrica ellos se sienten como hermanos, ya que todos los detalles concuerdan en sus historias y solo falta el análisis para confirmar.
La única persona que tiene una hermana desaparecida hace años es José Domingo, un hombre trabajador que por unos 15 años trabajó en Asunción para luego volver a su querida Pilar, donde formó una familia, tiene su hogar y trabaja como carnicero. El hombre se animó a contar su historia, pese a que ni se cruzó por la mente el hecho de que Enrica sea su hermana.
“Yo sabía que tenía una hermana desaparecida. Según la historia que manejo, mi mamá tuvo mellizos, pero los separaron”, dijo entre sentimientos encontrados. Relató que fue su esposa la que encontró la publicación y le dijo: “Parece que ella es tu hermana. No creo, le contesté. Porque parecía muy jovencita y mi hermana tendría que tener entre 41 y 42 años”.
Pero su esposa insistió y le volvió a mostrar la publicación a José, indicándole el parecido que había entre ambos, pero él no le dio mucha importancia. Hasta que empezó recibir llamadas y mensajes de una persona que conocía el caso. “Entonces contacté con mi hermana, quien me dijo que recuerda que los sacerdotes llevaron a nuestra hermana cuando ella tenía 15 años”, manifestó.
Afirmó que luego de hablar con una de sus hermanas fue cuando se dio cuenta de que podría tratarse de uno de ellos. Hizo los cálculos y los números dieron de que hace 40 años su hermana fue separada de la familia. “Todo fue concordando”, siguió relatando.
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Cómo pasó todo
José Domingo indicó que tiene un recuerdo muy vago de todo lo que pasó porque en ese entonces solo tenía 9 años, pero que su madre había dado a luz a dos bebés y luego de 10 días ella quedó muy enferma y fue internada en un hospital. “Le agarró derrame y se cayó sobre uno de los bebés que era un varoncito, mellizo de la hermana a quien se entregó en adopción”, explicó.
Agregó que tras el incidente por el que pasó su mamá, una mujer le dijo que su bebé había fallecido tras la caída. “Pero no sabemos si está vivo o muerto y tampoco sabemos quién le avisó a ella que nuestro hermano falleció. Así también, le mostró una foto y le dijo que la nena (melliza del varón) estaba en Pilar, que estaba bien”, señaló.
Manifestó que un tiempo después el doctor les indicó que la bebé tenía que estar con la madre, pero para ese entonces el padre Atalio Cordioli ya había conversado con la hermana mayor, quien quedó como cuidadora de sus hermanos mientras su madre estaba internada. “Contactó directamente con ella (hermana mayor), mi mamá no sabía nada; pero ya le había entregado a mi hermanita. Ahora me siento muy feliz y emocionado por encontrar a mi hermana”, dijo entre lágrimas.
De confirmarse, viene a Paraguay
Por su parte, Enrica, también en contacto con nuestro medio, detalló que en tres días llegará el kit de ADN a Paraguay y que luego debe ser enviado nuevamente para Italia. “En 15 a 20 días creo que tendremos resultados”, aseguró.
Destacó que está muy segura de que José es uno de sus hermanos, ya que tiene mucha concordancia en cuanto a las historias, además de un parecido muy importante. La mujer aseguró que de confirmarse las pruebas de ADN, vendría al país. “Sí, viajaría, para conocer a mi familia”, resaltó.
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