La función que desempeña el profesional kinesiólogo dentro de las unidades de cuidados intensivos (UCI) es fundamental. Es parte importante del equipo multidisciplinario en la recuperación del paciente, ya sean diagnóstico de COVID-19 u otros que así lo requieran.
Al respecto, la licenciada Ruth Ortiz, encargada del departamento de recuperación de pacientes críticos respiratorios de la carrera de Kinesiología y Fisioterapia de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción (FCM-UNA), refirió que el trabajo con los pacientes con COVID se inicia con la admisión de los pacientes a la UCI.
Mencionó que desde un principio se supo que fueron pacientes muy complejos desde el punto de vista respiratorio, pero durante su estadía en la terapia también se iban generando otras complicaciones asociadas a los días de ventilación y a la permanencia en la UCI.
“Los pacientes en cuidados intensivos son complejos en su patología, necesitan un soporte desde el punto de vista de los cuidados respiratorios, tienen una vía aérea artificial, son pacientes que están ventilados por muchos días, por tanto tienen asociadas complicaciones respiratorias”, expresó.
Explicó que el uso de los sedantes, de las medicaciones utilizadas para estos tipos de pacientes, genera diversas complicaciones; una de ellas y la más común fue la debilidad adquirida en unidad intensiva, complicación crónica, que incluso si el paciente lograba salir de esta área, quedaba con una secuela posterior, sea del ámbito neurológico, crónico y otros. Estos pacientes deben ser tratados en varios aspectos, no solamente respiratorio, sino también en el aspecto de la neurorrehabilitación.
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“Vimos pacientes que incluso fueron seguidos después en salas pos-COVID y una vez de alta también hicieron su seguimiento a través de la teleconsulta. Tenemos un equipo de trabajo bien organizado, un grupo exclusivo en la terapia intensiva”, manifestó Ortiz.
En este sentido, indicó que la kineconsulta sigue activa, viendo pacientes con secuelas pos-COVID. Señaló que existe además un flujo importante de pacientes con patologías crónicas que pueden ser perfectamente monitoreados a través de la teleconsulta. En este sentido, cabe mencionar que la línea habilitada para agendamiento es el (0986) 291-314 y las personas deben contar con una derivación médica.
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Ortiz dijo además que está comprobado que los pacientes que tienen una movilización en la terapia más rápidamente se pueden desvincular de la ventilación mecánica; asimismo, pueden progresar en su salida de cuidados intensivos sin tantas secuelas asociadas a la estadía prolongada.