Pedro Juan Caballero (Emerson Dutra, corresponsal)
Mientras en la capital departamental se daba a conocer con “bombos y platillos” la creación de un comando bipartito con la finalidad de combatir el crimen organizado, agentes policiales de élite “coparon” la ciudad de Ponta Porá, Brasil.
De acuerdo a los datos desde el pasado lunes una dotación de 80 hombres, todos fuertemente armados, se instalaron por tiempo indeterminado en la zona de frontera.
La orden fue dada por el propio gobernador del estado de Mato Grosso do Sul, Reinaldo Azambuja, según se dio a conocer.
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La finalidad de dotar con más hombres las instituciones policiales es evitar que la ola de violencia pase la línea internacional y se instale, de igual manera, al otro lado de la frontera.
La presencia de esos uniformados hizo temblar la mafia de frontera. Pero en la terraza del país nada ha mudado. La policía sigue sumergida en sinnúmeros de necesidades que van desde la falta de patrulleras, combustibles e inclusive proyectiles, situación que según el alto mando dificulta entablar una lucha frontal contra el crimen organizado.
Ejecución
Aunque parezca difícil de creer, mientras el viceministro del Interior, Pablo René Ríos, daba la noticia sobre la creación de un comando bipartito para luchar contra el crimen organizado, en la ciudad de Karapaí, asesinaban a un agente policial.
Se trata del suboficial Pastor Miltos quien prestaba servicios en la colonia Yukyryguasu del distrito de Capitán Bado. De acuerdo a los datos, el hombre fue asesinado a metros de una comisaría por dos sicarios fuertemente armados. Nada se sabe aún sobre el móvil de esta nueva ejecución que se registró en el departamento de Amambay.
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