La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), en el marco de su política de cooperación internacional, desde el 2017 opera de manera conjunta con instituciones de Argentina para la lucha contra el crimen en la región. Entre ellos el Ministerio de Seguridad de la República Argentina, Agencia Federal de Inteligencia, Ministerio de Justicia y Seguridad de Buenos Aires.
Indican que lograron 59 operaciones antidrogas y más de 5 millones de dólares en pérdidas al narcotráfico. Además de la incautación de 19.442 kilos de drogas, 38 hectáreas y 1.364 plantines de marihuana, 70 detenidos, 54 vehículos, 11 armas, 18 campamentos, 2 laboratorios, 9 pistas clandestinas y 385 kilos de cocaína.
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Cooperación con Brasil
Por otra parte, con la Policía Federal del Brasil, Senad viene realizando un ejemplo de cooperación internacional contra el crimen organizado, ya que desde que entendieron que los esfuerzos dispersos reportaban resultados modestos en términos de lucha contra el crimen organizado.
A partir del 2014 ambos países decidieron reformular el trabajo a través de una mirada y esfuerzos conjuntos que introdujeron un combate con un nivel de mayor eficiencia, con históricos decomisos, expulsiones de criminales de las organizaciones más peligrosas de la región como el Comando Vermelho y el Primer Comando de la Capital (PCC).
Desde la Senad refieren que en la actualidad no existan cabezas visibles de liderazgo criminal como en los años en los que Jarvis Ximenez Pavão, Pingo Soligo, Cabeza Branca y tantos otros que construían poderes a fuerza de colosales imperios del narcotráfico en parte se debe a la conexión operativa que han afianzado con la Policía Federal y que hasta la fecha ya llevan 179 procedimientos.
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Cifras de labor binacional
En términos de incautaciones, la cooperación binacional trajo consigo el decomiso de 6.939 kilos de cocaína y 21.000 toneladas de marihuana, así como la expulsión de 22 delincuentes brasileños de alta peligrosidad.
Indicaron que los 1.808 centros de producción de marihuana destruidos constituían lugares desde donde los esquemas de tráfico de frontera negocian el ingreso y salida de cargamentos con las mencionadas organizaciones del vecino país.
Con pérdidas de alrededor de 1.032 millones de dólares, los lucrativos negocios de la criminalidad se han visto notoriamente afectados en su patrimonio con despliegues de operativos conjuntos.