El viajero colombiano Jhon Alexander Galvis asegura que su gato “Bella creación”, más conocido como El gato mochilero, no murió por un ataque de perros y que su experiencia como mochilero y como “padre gatuno” le dicen que su amigo fue víctima de la crueldad humana, es decir, fue envenenado. “En mi corazón de padre gatuno, Bella no fue atacado por perros, Bella fue envenenado”, afirmó.
“Descarto no, yo estoy plenamente seguro y convencido en mi sano juicio como colombiano que ha caminado por cinco países, que Bella no fue atacada por los perros. Lastimosamente, se ha querido divergir esta situación, no sé con qué pretensiones, no sé qué se buscó queriendo hacer pasar que la muerte de Bella fue a consecuencia de ataques de perros, donde no hubo”, señaló el colombiano en comunicación con La Nación.
Galvis tenía que casarse hoy con su prometida Yeni Gonzáles Barreto, la paraguaya oriunda de Coronel Oviedo, en Caaguazú; sin embargo, lastimosamente aplazó la boda a consecuencia de la muerte de Bella creación, el lunes pasado; el hijo felino de Galvis que con mucho amor también adopto Yeni. Esto, debido a que siguen muy afectados por la partida del peludo amigo.
Galvis insiste en exigir justicia para Bella y todos los gatos NN que no tienen quienes los defiendan: La muerte de Bella, para el colombiano significa un símbolo de la lucha contra el maltrato animal. Ongs y personas de buen corazón se pusieron a su disposición por si quiera accionar judicialmente en caso de saberse quién fue responsable de este presunto acto cruel.
“La supuesta autopsia que se me entregó muestran inconsistencias que a la luz de un ciego son notables. Yo no soy patólogo ni veterinario y no he estudiado ciencias forenses, pero en su lugar he caminado mucho por más de 20 años, no solo en los cinco países sino en mi tierra, en mi ciudad donde tuve que lidiar con ataques de perros, venenos para gatos y sé la diferencia de lo que es un veneno y un ataque de perro”, insistió Galvis.