Mientras el Ministerio de Educación analiza la posibilidad de que los estudiantes vuelvan a clases presenciales, varias instituciones educativas, especialmente las del interior, urgen de mantenimiento antes de recibir a los alumnos. Este es el caso de la Escuela Juana Pabla Carrillo, de la ciudad de San Estanislao, toda la instalación corre el riesgo de derrumbe.
Según la denuncia realizada por los docentes y padres de familia, la estructura de la escuela está hecha de madera y recibió su último mantenimiento hace 40 años. La institución está situada en la compañía Orienta de la citada ciudad, del departamento de San Pedro.
“La estructura está muy deteriorada y no puede albergar así a los estudiantes una vez que se retomen las clases presenciales. Tengo acá 27 años de ejercicio y esta ya era la escuela. Contaba con una reconstrucción en ese tiempo”, dijo una de las docentes.
Afirmó que las aulas que ahora están por desplomarse ya tienen 40 años. La escuela fue fundada hace 60 años, pero solo una vez fue visitada por las autoridades. “Estoy por jubilarme y quiero ver a la escuela en buenas condiciones para recibir a los niños”, apuntó.
Al notar la presencia de la prensa varios padres y vecinos de la zona se acercaron para denunciar el total abandono de las autoridades, además de pedir la construcción de un nuevo pabellón para los alumnos.
“Esto representa un peligro para los niños. Ya ven por la triste situación por la que estamos pasando y no son solo nuestros hijos los que se van a arriesgar para volver a clases”, dijo una madre de familia.
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Aseguró que aguardan la ayuda de las autoridades para mejorar la instalación, ya que ni siquiera pueden pasar cerca de la escuela, por el peligro de derrumbe. “Nadie nos hace caso, mucho ya pedimos”, dijo. Anunciaron que para la semana que viene tienen prevista una movilización en caso que no haya una solución.