El director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, manifestó que Paraguay sigue estando a la cabeza en mortalidad por COVID-19 por millón de habitantes, pero con una marcada tendencia al descenso. Al mismo tiempo, resaltó la disminución “vertiginosa” de contagios de coronavirus a nivel país. Sin embargo, insistió en que el país continúa en zona roja.
“Hay un descenso muy vertiginoso, estamos en un punto equidistante a los primeros días de marzo. El país está en rojo todavía. Por algo muchos países de Europa nos ponen muchas condiciones porque procedemos de un país con mucha incidencia”, afirmó el epidemiólogo esta mañana.
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Sequera resaltó que en Central y en Asunción se registra un importante descenso de casos positivos. También se observa la misma situación en los departamentos de Cordillera, Caazapá, Guairá y Alto Paraná. Aseguró que Itapúa repuntó en casos, pero muy por debajo de lo que fue el pico de contagios. Agregó que continúa siendo el departamento más golpeado por la segunda ola.
“Aunque el país en líneas generales está en rojo aún, si vemos por distritos el 90% tiene casos. El COVID está en todo el territorio nacional, pero solamente 73 distritos, es decir el 28% del país está en nivel 4. Recordarán que hace un mes estaba por encima del 100%”, manifestó Sequera en conferencia de prensa.
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Señaló que se registra un descenso importante en Presidente Hayes, Chaco paraguayo, pero que existe un aumento de casos en distritos como General Bruguez y en pueblos pequeños de esta zona del país, probablemente sea por el movimiento que hubo en las elecciones internas.
Sequera manifestó son 600 a 800 decesos por COVID-19 por semana y que la mayoría de fallecidos se encuentra en el rango de edad entre los 35 a 49 años. De los más de 13.645 fallecidos por COVID, suman 2.154 personas con menos de 50 años que perdieron la vida por complicaciones por el virus. “Prácticamente el 80% de todas las muertes en menores de 50 se da entre mayores de 35 a 49 años”, dijo.
Sobre la vacunación masiva contra el COVID-19, señaló que esta franja etaria pertenece a los grupos que deben ser priorizados para recibir las dosis disponibles en el país. “Todos queremos vacunarnos. A todos nos van a llegar las vacunas, pero todavía tenemos pocas balas y tenemos que ser precisos. Tenemos que apuntar en quienes tienen COVID, que tiene 2 o 3% de probabilidad de muerte. Todos tenemos probabilidad de muerte al fin, pero tenemos pocas balas”, manifestó Sequera.