El ministro de Salud Pública, Julio Borba, proyecta una vacunación récord en el mes de julio en Paraguay. En este contexto, en 15 días más se estaría habilitando la vacunación para toda la población, sin ningún requerimiento.

Paraguay tiene hoy una población de 7.353.038 habitantes, según un informe dado a conocer en febrero de este año por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es decir que, el Gobierno debió asegurar, al menos, 14 millones de dosis de vacunas contra el COVID-19 para garantizar una vacunación masiva de su población y en caso de que sobren dosis, donarlas, como lo hicieron varios países a lo largo del mundo.

Precisamente, una salvedad para que el país habilite la vacunación a toda la población mayor de 18 años dentro de 15 días depende de la llegada del millón de biológicos de Pfizer donados por los Estados Unidos hace unos días, así como de otras donaciones y compras realizadas en el marco de la pandemia de COVID-19, pero que sin embargo no llegaron como se tenía previsto.

Este fin de semana, Salud Pública tiene la meta de inmunizar a 50.000 personas. La vacunación está habilitada para personas de 18 a 49 años con comorbilidades, que son inmunizadas con dosis de Sputnik V y Moderna.

Las mismas deben estar inscritas en la plataforma vacunate.gov.py y contar con el certificado médico que avale su condición patológica o enfermedad para acceder a la vacuna. Este hecho generó polémica, ya que muchos médicos denunciaron presiones para otorgar certificados, luego se sumó Salud Pública señalando que sancionaría a los galenos en caso de hallar documentos con datos falsos.

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Sin embargo, y pese a que en los últimos días se intensificaron las jornadas de vacunación, el tiempo perdido se refleja en las cifras de inmunización a nivel país. De acuerdo al portal Datos Macro, hasta el viernes 02 de julio, Paraguay había vacunado a 783.265 personas, de las cuales 526.960 recibieron la primera dosis de los biológicos y solamente 133.391 ambas.

Estas cifran señalan que Paraguay tiene solamente al 0,01% de su población inmunizada completamente contra el COVID-19; mientras que el 0,07% lo está parcialmente. Para lograr la inmunidad de rebaño, se necesita al menos al 70% de la población vacunada.

Un ejemplo a nivel regional es Uruguay, que ya tiene a casi el 50% de su población completamente vacunada contra el COVID-19. Si bien tiene poco más de 3,5 millones de habitantes, menos de la mitad de Paraguay, la estrategía uruguaya fue mejor y hoy ya está viendo la luz al final del túnel COVID-19.

En apenas un mes, redujo significativamente el número de casos activos de la enfermedad, pasando de un pico de 36.121 a fines de mayo a 13.657 ayer viernes. Los expertos aseguran que la mejora está íntimamente atada a los altos índices de vacunación, cuya campaña comenzó el pasado 1 de marzo con un ritmo intenso.

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“Uruguay tiene vacunas para todos”, dijo esta semana el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, tras asegurar que el país adquirió 7,5 millones de dosis de tres laboratorios. “No es un eslogan, es una realidad”, insistió.

Al ritmo actual, Uruguay alcanzará en agosto el 70% de su población completamente vacunada; mientras, su vecino Paraguay, seguirá deambulando al ritmo del COVID-19. En este contexto, solo resta esperar la llegada masiva de vacunas, la habilitación de vacunatorios récord en todo el país y la concurrencia de la población para inmunizarse y avanzar más rápidamente hacia la “normalidad”.

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