El coronavirus llegó a la casa de la familia Cabrera Espínola, contagiando al padre y al hijo. Ambos esperaban que el virus se desarrolle de la manera más leve y posteriormente se marche sin causar mayores daños a la salud; sin embargo, la realidad fue otra para ambos hombres, lastimosamente.

Juan Cabrera tiene 55 años y su hijo Edgar Ramón Cabrera Espínola, 35 años. De fortuna, fueron muy pocos metros los que dividieron a estos hombres durante la internación en el hospital Ingavi del Instituto de Previsión Social (IPS), ya que estuvieron en camas muy cercanas. Allí permanecieron casi un mes, e incluso fueron intubados en su momento.

Luego de una larga lucha, ambos vencieron al COVID-19 al mismo tiempo, por lo que fueron dados de alta el mismo día, el pasado lunes 28 de junio. Ahora los dos hombres continúan su recuperación en su domicilio.

Lea también: Trabajadores de Clínicas exigen habilitar pabellón de contingencia ya finalizado

El padre inició los síntomas el 27 de mayo y luego de varios días ingresó a urgencias. Siendo un paciente hipertenso preocupó su evolución negativa, por lo que incluso fue intubado. Sin embargo, mediante los tratamientos se logró extubarlo el 23 de junio con éxito.

Por su parte, Edgar (el hijo) ingresó con tos productiva, una fuerte sensación febril en varias oportunidades y dificultad respiratoria. Primero se decidió su internación para oxigenoterapia y posteriormente fue intubado. No obstante, debido a la respuesta exitosa al tratamiento, se lo extubó el 16 de junio. Tras una buena respuesta al tratamiento, los médicos decidieron otorgarle el alta a sala general para completar su rehabilitación, incluso ya sin antibióticos.

Lea también: COVID-19: descenso de casos puede ser temporal y demanda en UTI sigue alta

Al pasar los días, la evolución de ambos fue mejorando hasta que el 28 de junio se decidió otorgar el alta a Edgar y a su padre. Ambos pacientes se encontraban bajo el manejo de la doctora Juana Morínigo, jefa de sala, y el doctor Williams Ortiz, jefe de servicio del IPS Ingavi.

La familia también agradeció el soporte infectológico que estuvo a cargo de la doctora Desirée Almirón, así como al staff de enfermería a cargo de la licenciada Sadya Arrúa y al kinesiólogo William Alvarenga.


Dejanos tu comentario