Familiares de pacientes internados en el hospital Ingavi del Instituto de Previsión Social (IPS) aseguran que cuentan con una ficha de autorización para ingresar a las salas posterapias si sus pacientes son dependientes. En este caso, Liz Molas, quien ingresó a esta zona del centro asistencial, mostró la foto de su autorización, ya que denunció que la doctora Mónica Abente, jefa de sala, le arrancó la autorización de las manos y que en todo momento actuó de forma prepotente y violenta.
“Nosotros tenemos un permiso autorizado, ellos nos entregaron porque mi papá es dependiente. Entonces, para ingresar allí yo presento mi autorización a los licenciados e incluso a los doctores, cuando yo ingresé para darle el almuerzo a mi papá, ellos –los médicos– le estaban haciendo su fisioterapia, esperé un rato y en una de esas aparece la doctora Abente y me dice: quién te dejó pasar; a lo que yo le respondí que tenía una autorización, saqué, le mostré y allí me arranca de las manos”, relató Molas, familiar de paciente internado sobre el incidente.
Tras quitársele la autorización, Molas convocó a sus familiares por mensaje para que vengan a hablar con la jefa de sala sobre el tema de la autorización, a lo que llega su madre, su hermana Jesica Molas y el señor Luis Antonio Silvero Espínola.
La doctora Abente, quien, según relatan, se encontraba con el Dr. Ángel María Gómez –esposo de Abente–, accedió a explicarles la situación y les mostró un protocolo pegado en la pared e incluso les dijo que podían filmar tal explicación.
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En ese sentido, el señor Silvero Espínola empezó la filmación de la explicación de la doctora Abente, cuando el doctor Gómez de un manotazo tira el celular y empieza el forcejeo. La médica procedió a levantar el celular perteneciente a Silvero Espínola y lo coloca frente a su vientre, según la versión de los familiares de pacientes, quienes afirman que ya radicaron la denuncia contra ambos médicos para que se verifiquen todas las cámaras y la verdad salga a la luz.
Según el parte policial de la denuncia hecha por los médicos, la doctora Abente presenta múltiples laceraciones y escoriaciones en el tórax, brazos, cuello, espalda y abdomen, producto de los golpes perdió a su bebé en el vientre.
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El Ministerio de Salud Pública sacó un comunicado en el que se solidarizó con la doctora Mónica Abente por la situación que se encuentra atravesando tras la pérdida de su bebé y repudió los hechos de violencia en el hospital Ingavi, e instó a las autoridades que investiguen y castiguen a los responsables.