El doctor José Fusillo, titular de la Sociedad Paraguaya de Neumología y médico del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram), manifestó que el personal de blanco ya no espera mayores medidas restrictivas por parte del Gobierno ante el aumento de contagios, internaciones y muertes por COVID-19 entre la población paraguaya.

Fusillo aseguró que Paraguay tiene casi el doble de cantidad de muertos por millón que Brasil y casi tres veces que India. “Creemos que las decisiones ya están hechas, que medidas más extremas ya no se van a tomar. Vemos muy lejana esa decisión. El gran problema es que no tenemos vacunas. La vacuna es un arma fundamental. Hoy por hoy, no la tenemos”, manifestó.

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El profesional médico señaló que Argentina volvió a una cuarentena total con un 78% de sus terapias ocupadas, mientras que Paraguay cuenta con el 100% de sus terapias ocupadas. La diferencia es que el país no cuenta con restricciones sanitarias que se controlen. Indicó que las proyecciones de tener un promedio de 140 fallecidos a causa del COVID-19 por día lastimosamente se va a cumplir.

Añadió que el gran problema de las restricciones es que no sirven mucho si no se acompaña de un buen control y el cumplimiento no es total. Además, el Gobierno no ofrece una “moneda de cambio” para encerrar a la población como ofrecer vacunas o subsidio a las familias que sobreviven de sus actividades diarias.

Igualmente, expresó que la vacunación masiva contra el COVID-19 es importante, pero tampoco es una estrategia totalmente efectiva, ya que deberían ir acompañadas de restricciones sanitarias que se cumplan a cabalidad.

“Económica y políticamente es muy difícil tomar decisiones de restricciones totales de vuelta, pero algo tenemos que hacer. No podemos vivir así y seguir como que no pasa nada. Meter la basura bajo la alfombra y tirar toda la pelota a los médicos en los hospitales y seamos nosotros los que tengamos que sostener”, lamentó el profesional médico.

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Indicó que los países que lograron vencer al coronavirus en la actualidad aplicaron políticas sanitarias, intensas acompañadas de inmunización masiva con su población encerrada, lo que logró que su población hoy tenga una vida normal, citó los casos de Israel y Estados Unidos.

“El gran problema de las restricciones es que si no se acompaña con el control y no hay cumplimiento exacto, no sirven para nada. En Paraguay sería muy difícil llevar a cabo restricciones totales. La búsqueda de la normalidad intensiva nos está alejando cada vez más de ella. La vacunación masiva sola tampoco es una salida. Esto ya es insostenible”, dijo Fusillo en contacto con 730 AM esta mañana.