Paraguay sigue en el pico más alto de la pandemia desde hace varias semanas, así todos los días se reportan más de 2 mil contagios y arriba de 70 fallecidos. Según la Dirección de Vigilancia de la Salud, en el 2020 Paraguay tuvo un 12% más de mortalidad que en años anteriores, pero la cifra igualmente se mantiene baja con relación a las cifras más drásticas de la pandemia en el mundo.

El doctor Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud, explicó que la pandemia de COVID-19 se concentró y tomó fuerza donde existe mayor número de población. “En el 2020, Paraguay tuvo un 12% más de mortalidad que en años anteriores. Sin embargo, esta cifra se considera baja, ya que en España o Italia, la pandemia multiplicó el exceso de muertes hasta por 3 veces”, dijo en el ciclo de webinarios “Ciencia y COVID-19, una mirada crítica”.

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Argumentó que la menor tasa de mortandad se debió a la cuarentena total que fue implementada entre marzo y junio del 2020, pero que este año, atendiendo la nueva variante del virus que se considera 2,5 veces más contagiosa, logró que el nivel de contagio sea también de 2,5 veces más a nivel país.

“La nueva variante multiplicó casi por tres el nivel de contagio desde su ingreso, de 5.000 por semana a 15.000. Lo que ocurre no es una consecuencia conductual, sino que tiene que ver con un fenómeno biológico: la nueva variante”, confirmó.

Director de Vigilancia de la Salud, doctor Guillermo Sequera. Foto: Christian Meza.

“Muchos fallecidos con diabetes y obesidad”

En otra parte, Sequera expresó que también existen otras circunstancias que hacen que sea mayor el número de fallecidos, como la obesidad y la diabetes. Las personas que son portadoras de estas enfermedades son las que desarrollan la forma grave de COVID-19.

“La obesidad es una enfermedad epidemiológica en la que participan tanto la información genética como los factores externos”, argumentó. El portal Ciencias del Sur destacó como ejemplos económicos que es más barato comer carbohidrato que proteínas, mientras que los sistemas de producción también ofrecen el máximo producto al menor costo posible.

La obesidad y sedentarismo son parte de una epidemia silenciosa. Foto: AFP.

Se reportaron 180 reinfecciones

Así también, Sequera apuntó que hasta la fecha existen solo 180 casos de reinfección y que el pico de contagio se dio más entre personal de blanco antes que en la comunidad. “Estamos en la segunda ola, y esto nos está ayudando a predecir”, sentenció.

“Las personas deben saber lo que está ocurriendo en su comunidad para cuidarse. En esto, los medios de comunicación ejercen un papel fundamental. Es necesario hacer cuarentenas sin necesidad de que la gente deba salir. Es un lujo quedarse en casa, es un problema estructural; acá hicimos lo que pudimos con el Estado que tenemos”, puntualizó.

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El sedentarismo

Expresó que la epidemiología, más allá de un virus, es aquello que le ocurre a la gente. “Por ejemplo, ahora un gran problema de salud pública es el sedentarismo. Es una epidemia silenciosa, pero que inclusive mata muchísimo más”, destacó.

El epidemiólogo resaltó que en Paraguay más del 90% de la mortalidad en personas jóvenes, e incluso niños, son por enfermedades crónicas. “El Ministerio de Salud tiene que invertir más donde está el problema realmente. Aparte de ser las que más matan, son las más costosas; una persona con cáncer gasta en los tres últimos años de su vida el 80% de lo que gastó en toda su vida”, concluyó.

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