Mirna Gallardo, la titular de la Asociación Paraguaya de Enfermería, confirmó que son 52 personas entre enfermeros y enfermeras que fallecieron por COVID-19 desde el inicio de la pandemia, mientras 39 se encuentran luchando por su vida en una unidad de terapia intensiva (UTI).
Ante la angustiante situación solicitan al Ministerio de Salud la contratación de más personal por dos meses para oxigenar los servicios que están desbordados de pacientes. Gallardo señaló que el personal ya no da abasto al asistir a un promedio de 20 pacientes por día. Estima que existen más de 1.800 enfermeras que buscan trabajo, por lo que piden que sean contratadas.
“Estamos mal, no sé cual es el problema del Ministerio de Salud en contratar más personas por dos meses, mientras dure la urgencia. Estamos atendiendo a 15, 20 pacientes por cada enfermero o enfermera. En este momento tenemos 39 enfermeras en terapia intensiva y 52 fallecidas a la hora, porque esta madrugada falleció otra colega de San Pedro”, expresó Gallardo.
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“Nuestras compañeras se quedan en los pasillos”
Indicó que la enfermera Marta Mena, desde el domingo esperaba una cama en terapia intensiva, mientras que recién en la tarde de ayer se consiguió una unidad en el Hospital Nacional de Itauguá. Posteriormente se le trasladó desde San Pedro en unas cinco horas; sin embargo, no resistió a su llegada al centro asistencial referente en atención de pacientes con COVID-19.
La vocera del gremio, además, se refirió sobre la muerte de la licenciada Sally Fretes, enfermera que brindaba servicio en el Hospital Distrital de Mariano Roque Alonso. “Ella falleció en el Hospital Nacional de Itauguá. Ella estaba embarazada de gemelos, era menor de 30 años. Nuestras compañeras se quedan en un pasillo como todos los que necesitan ingresar a UTI”, afirmó la titular.
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Indicó que enviarán una nota al Ministerio de Salud Pública para la utilización del medicamento antiviral remdesivir, para que se pueda ayudar a reducir la cantidad de internados en los hospitales que están colapsados en el país.
“Vamos a pedir que incluya el protocolo para administrar el remdesivir y, a lo mejor, reducir en alguna medida los requerimientos en terapia intensiva. Enfermería hoy ya no se calla, vamos a exigir lo que corresponde para las enfermeras y los pacientes”, afirmó Gallardo.