Este sábado, el Ministerio de Justicia informó a través de redes sociales que dispuso el cierre epidemiológico del Centro Penitenciario para Mujeres Juana María de Lara de Ciudad del Este y del Centro de Rehabilitación Social (Cereso) de Encarnación por confirmarse casos activos de COVID-19 en personas privadas de libertad (PPL).
Indicaron que las mismas se encuentran aisladas del resto de la población y en ambos lugares ya fueron activados los protocolos para mitigar la expansión del virus y las PPL con coronavirus están siendo monitoreadas por la Dirección de Salud Penitenciaria.
En el penal Juana María de Lara cuentan con dos positivos y en el Cereso con un caso. De esta manera, se suman a las penitenciarías de Coronel Oviedo (13 casos activos), Pedro Juan Caballero (3 positivos, de los cuales uno es activo), Padre Juan Antonio de la Vega (13 confirmados y un activo), Emboscada (10 casos y un activo), Buen Pastor (un caso activo) y Serafina Dávalos (9 casos activos).
Al respecto, el director de Salud Penitenciaria, Daniel Cantero, refirió que los centros penitenciarios donde el virus está activo son constantemente monitoreados para prevenir la expansión del mismo.
“Hoy tenemos 8 penitenciarías donde hay COVID-19. En esos lugares reforzamos los controles y procedemos al hisopado de las personas privadas de libertad con síntomas para descartar o confirmar la enfermedad”, comentó.
Situación en centros educativos
En cuanto a los 27 adolescentes en conflicto con la ley penal del Centro Educativo Sembrador de Villarrica, estos están recuperados de la enfermedad. En el Centro Educativo Itauguá, la Dirección de Salud Integral y Asuntos Sociales del Servicio Nacional de Atención al Adolescente Infractor (Senaai) registra seis casos positivos y activos.
Cantero aprovechó la ocasión para reiterar que la conciencia ciudadana es fundamental para disminuir los contagios.