El Hospital Distrital de Lambaré no escapa del colapso sanitario que se vive actualmente en el país, por lo que se encuentra con total ocupación de camas de salas comunes y de unidad de terapia intensiva (UTI) por pacientes con COVID-19. Rostros de sufrimiento y dolor se observan entre decenas de familiares apostados frente al centro asistencial, que ya no encuentran solución ni respuesta por parte de las autoridades sanitarias ni el Gobierno.

El personal de salud trabaja saturado ante el pedido de asistencia por casos positivos en la ciudad, donde se vive la difícil y dramática situación por parte de médicos que reconocen que deben seleccionar pacientes para internación entre personas con mayores chances de continuar con vida.

Una joven manifestó que tiene su abuelo hospitalizado sin encontrar una cama de terapia intensiva pese a estar intubado en el centro asistencial luego de ingresar el viernes pasado. Aseguró que el personal de blanco prioriza la atención a los pacientes más jóvenes porque tienen mayor posibilidad de salvarse. Además, la familia se hace cargo de la compra de insumos básicos como guantes.

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“Él está en una sala de urgencia con otras personas, él ya está intubado. Ahora lastimosamente ya nos dijeron que en la lista del Seme ya no se le puede cambiar por estar intubado y por su condición ya pierde la oportunidad de poder ser trasladado. Como es abuelo, se le da la prioridad a los pacientes más jóvenes. Es injusto, no debería ser así”, expresó la joven Leticia en comunicación con el canal Telefuturo.

La misma joven señaló que la semana pasada un hombre falleció por COVID-19 sentado esperando asistencia ante la falta de camas. Lamentó que los pacientes con diferentes enfermedades se encuentran en la misma sala de contagiados con coronavirus. Manifestó que un paciente que sufrió un ACV puede estar internado al lado de un enfermo por el virus con el riesgo que esto significa.

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Por su parte, otra paciente manifestó su desesperación en búsqueda de una cama para internación para su padre, mientras que los médicos del hospital señalan que ya no pueden atender la alta demanda de pacientes con COVID-19, que se debaten entre la vida y la muerte. Los profesionales médicos reconocen estar colapsados, sin camas disponibles. Aseguró que buscan la manera de encontrar camas o realizar traslados a otros centros asistenciales.

“El hospital está trabajando al 100%, a pleno rendimiento y seguramente más, ya que se triplicó la ocupación de camas en urgencias. De unas 10 a 12 camas estamos con 23 a 25 plazas para pacientes internados. Se colocaron camillas, sillones de hidratación para poder albergar a pacientes sospechosos y con COVID positivo que están acudiendo a nuestro hospital. Se incrementó de una manera masiva el número de consultas respiratorias en los últimos 7 días. El hospital está completamente lleno de pacientes con coronavirus”, afirmó un médico del lugar.