Para la feligresía católica, con el Miércoles de Ceniza se inicia la Cuaresma que los prepara para la gran fiesta de resurrección de Cristo. Desde mañana y durante 40 días se deben preparar mediante arrepentimiento, tiempo de caridad y oración para resucitar con Cristo el Domingo de Pascuas.

Según el padre Antonio Rafael, de la parroquia San Pio X, al principio recibían la ceniza esos grandes pecadores que tenían que hacer un año de penitencia sin entrar a la iglesia hasta que el obispo les diese el abrazo de reconciliación el día del amor fraterno, que es el Jueves Santo.

“Antiguamente, a principios del cristianismo, en los primeros de siglos, todos aquellos que cometían un pecado gravísimo como el homicidio o quemar una casa se les apartaba de la iglesia por un año y el Jueves Santo recibían el abrazo del obispo y volvían a la iglesia”, contó en contacto con La Nación.

Apuntó que una de las penitencias impuestas a estas personas era que tenían que asistir a los lugares de peregrinación en Jerusalén, Roma y España, en Santiago de Compostela. “Pero cuando llegaba el año de penitencia, decidieron que hay que hacer un tiempo especial de penitencia y dedicarle unos días antes del Jueves Santo, y fue ahí que se dio inicio a la Cuaresma”, resaltó.

Indicó que otro de los precursores de la Cuaresma fue que antes solo bautizaban el día de pascuas. “Porque el bautismo es hacer morir a la vida en pecado de la persona vieja y dar pie a la nueva resucitando con Jesucristo. Entonces, dedicaban un tiempo a la preparación del bautismo”, aseguró.

El sacerdote manifestó que juntando estas dos fechas especiales, decidieron que sean 40 días de preparación para recibir a Cristo resucitado. “En aquellos tiempos, el número 40 era muy importante para la Biblia, como los 40 días en el desierto, 40 días de diluvio, los 40 días de Jesús en el desierto y era ya un número crucial para la Cuaresma”, sostuvo.

Aseguró que más tarde empezaron a poner a todos la ceniza como señal de conversión y arrepentimiento. “Porque en realidad quien más o quien menos, todos tenemos nuestras fallas, nuestras limitaciones y todos somos pecadores”, señaló.

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Recordó que el tiempo de Cuaresma es la preparación para la Pascua. “La Pascua es resucitar y para resucitar hay que morir de todo lo malo, y eso se hace durante la Cuaresma. La Cuaresma es como un semáforo que nos para en medio de la vida, para saber cómo va mi vida, qué tengo que mejorar y dejar morir a muchas cosas y salir vivo con Cristo”, señaló.

“Entra uno con sus defectos y sus vicios, pero sale otro en Cuaresma”, dijo. Agregó que hay muchos católicos que no conocen el verdadero sentido de la Cuaresma y piensan que es el ayuno, la penitencia y no comer la carne, pero hay personas que han cambiado y se han convertido. “El fin de la Cuaresma es convertirse”, ratificó.

Para poder convertirse, deben seguir tres pasos en Cuaresma: la oración “reza más”, limosna “ayuda al más necesitado” y la abstinencia “relacionada a la carne. Estos son los medios para poder llegar al fin de la Cuaresma, que es la conversión”, concluyó.

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Desde la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos dieron a conocer en un comunicado las modificaciones que se implementarán en el rito del Miércoles de Ceniza para dar cumplimiento al distanciamiento impuesto en los protocolos sanitarios a nivel mundial.

“Si es oportuno, se acercará a los fieles que estén de pie, permaneciendo en su lugar. Asimismo, el sacerdote tomará la ceniza y la dejará caer sobre la cabeza de cada uno en forma de la cruz, sin decir nada”, asegura el pronunciamiento.

Para mañana miércoles 17 de febrero, varias parroquias se preparan para la imposición de ceniza, en algunos casos se realiza un agendamiento previo, pero la mayoría recibirá a las personas por orden de llegada.

Algunas de las misas previstas: Convento San Pío de Trinidad: 6:00, 15:00 y 19:00; Convento San Leopoldo: 6:00, 12:00 y 19:30; Parroquia San Pio X: 6:30 y 19:00; Automisa Parroquia San Pío X: 19:00; Parroquia San Francisco de Asís de Asunción: 6:15 y 19:00. Así también, en Nuestra Señora del Perpetuo Socorro: 6:00, 7:00, 10:00, 17:30 y 19:00; y la Parroquia Cristo Rey: 7:00 y 19:00.