En la fecha se recuerda el Día Mundial de Lucha Contra del Cáncer Infantil, fecha instaurada para concienciar sobre la lucha y cómo evitar este mal en los niños, representados en el lazo dorado que indica la fortaleza de estos guerreros. Se trata de una patología que ataca a los niños antes de los 15 años y que consiste en un crecimiento anormal de células malignas que se diseminan en el interior del cuerpo.

La doctora Verónica Rivas, oncóloga pediátrica del Acosta Ñu, comentó a La Nación que una de las formas de evitar la propagación del cáncer en infantes es la detección temprana y mediante los chequeos anuales del niño sano.

“Siempre son importantes los controles de niños sanos, estos se realizan en forma anual y de acuerdo a la edad del niño con su pediatra. Una vez al año es lo ideal”, puntualizó y resaltó que en el caso de presentar algún signo de alarma, deben acudir a consulta para recibir el asesoramiento de un profesional. “Los controles a tiempo pueden salvar vidas”.

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Destacó que entre los principales síntomas están fiebre, pérdida de peso, el niño se puede encontrar pálido, decaído, sin ganas de comer, con crecimiento abdominal (por tumores sólidos), dolores de cabeza que no pasan y convulsiones para los tumores cerebrales. Sangrados excesivos y moretones que demuestran problemas en la sangre.

Agregó que cada año en el Hospital Pediátrico Acosta Ñu se detectan al menos 110 pacientes pediátricos con algún tipo de cáncer. “Actualmente contamos con al menos 300 pacientes en tratamiento porque abarcamos tanto enfermedades hematológicas y no hematológicas que vienen a ser tumores sólidos”.

En otro momento, Rivas explicó que una vez que es detectada la enfermedad, los niños y niñas inician el proceso de tratamiento y una vez culminadas las medicaciones, se debe asistir a los controles por lo menos durante 5 años. “Atendemos pacientes sin detectar la patología, entre tratamiento y seguimiento, cuando ellos terminan el tratamiento quimioterápico persisten con los controles. Son cinco años que en total están con nosotros, no termina con la medicación”, aseguró.

Instó a los padres a realizar todos los chequeos a sus hijos y estar pendientes a cualquier síntoma y signos más frecuentes que puedan hacer sospechar sobre alguna enfermedad. Resaltó que desde la semana pasada realizaron una serie de actividades con sus pacientes internados y hoy con los pacientes ambulatorios, siempre cuidando todas las medidas sanitarias.

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Según el doctor Óscar Garozzo, de hemato-oncología pediátrica del hospital central, explicó que muchos consideran a esta fecha como triste. “Al hablar de cáncer pensamos que es algo dramático y trágico, y lo es en sus inicios, pero los números hacen que tengamos que festejar porque 70 de cada 100 niños encuentran la curación”, expresó.

La mayoría, pese a pasar por situaciones graves al inicio del diagnóstico, encuentra estabilidad. “Eso no es una casualidad, es consecuente del trabajo multidisciplinario. El tratamiento que reciben los niños asegurados del IPS es integral”, ratificó.

“Desde el primer momento que yo llegué, me dieron una paz y me llenaron de bendiciones. En ningún momento se refirieron como un mal a la enfermedad de mi hija”, dijo Wilma Centurión, madre de una paciente del IPS.

Resaltó que desde el primer momento decidió permanecer en el hospital por el buen trato que le ofrecieron y le siguen ofreciendo a su pequeña. “Le adoran y todas las licenciandas tienen unas manos santas. Fuimos los mejores atendidos durante este tiempo”, puntualizó.

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“Es muy importante para nosotros por los avances que hemos tenido en los últimos años para poder afrontar y tener un mejor diagnóstico y tratamiento para los pequeños guerreros”, dijo la doctora Angélica Samudio, del Hospital de Clínicas.

Explicó que uno de los cánceres más comunes en los niños es la linfoblástica, que afecta al 50% de los pacientes. “La leucemia es la más común, pero se tiene un 75% de sobrevivencia. El cáncer existe, pero se puede curar”, aseguró. Al mismo tiempo, manifestó que por años son diagnosticados unos 150 niños en el citado hospital.

“Con la pandemia, la atención del cáncer constituyó un desafío, aplicando los protocolos sanitarios y realizando las teleconsultas con los pacientes para el seguimiento de los tratamientos a fin de evitar la asistencia dentro del hospital, exceptuando a los pacientes con quimioterapia”, aseguró.

El acto conmemorativo de este año tuvo lugar en la planta baja de la institución con la presencia del vicedecano de la FCM-UNA, Prof. Dr. Gustavo Machain, así como los profesionales del Departamento de Hemato-oncología Pediátrica del Hospital de Clínicas, quienes simbólicamente y mediante un audiovisual reflejaron el trabajo realizado día a día por los personales.