En la tarde de ayer, militantes de grupos de izquierda de Argentina participaron de una marcha que se realiza el 2 de cada mes en la ciudad de Buenos Aires para pedir justicia por las niñas fallecidas durante un enfrentamiento entre el grupo criminal EPP e integrantes de la Fuerza de Tarea Conjunta. Aunque en casi todas las ocasiones se desarrolla de manera pacífica, esta es la segunda vez que termina con un acto vandálico contra sedes diplomáticas paraguayas.
El primer ataque a la embajada nacional en el vecino país y a los consulados se registró en octubre del año pasado, pero a diferencia de aquella oportunidad la de ayer fue más violenta, ya que fueron lanzadas dos bombas molotov. Esto por parte de nucleaciones políticas y sociales de izquierda que exigen que las autoridades argentinas inspeccionen los cuerpos de las dos menores muertas durante un combate.
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Tras el ataque, algunas personas fueron detenidas y entre las mismas figuraban dos prófugas de la Justicia paraguaya, Mariángela Guidita Abdala Carísimo y Giselle Noemí Ferrer (hoy ya fueron liberadas), quienes huyeron a Argentina tras protagonizar un hecho similar hecho contra el Panteón Nacional de lo Héroes.
En este contexto y atendiendo a la gravedad de los acontecimientos, Votá LN planteó a los lectores “¿Qué debería hacer el Gobierno tras los repetidos ataques a sedes diplomáticas paraguayas en Argentina”. Los resultados de la votación son los siguientes: el 85% votó a favor de “pedir la investigación y el castigo a los responsables”, el 11% cree que se debe “exigir respeto y garantizar la seguridad” y el 4% indicó que se debe “protestar enérgicamente por la sistemática violencia”.
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Es importante mencionar que la Cancillería Nacional emitió un comunicado expresando su repudio ante los hechos violentos, premeditados y coordinados. Sin embargo, no hubo una comunicación más certera de parte de las autoridades al respecto de los ataques y de las acciones a tomar. Incluso, las prófugas de la Justicia paraguaya que fueron detenidas ya fueron liberadas.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores señalaron a La Nación que no tienen “ninguna comunicación oficial del gobierno argentino sobre la condición de las dos ciudadanas paraguayas que habían sido apresadas por el ataque a la embajada en Buenos Aires”. Esto, a pesar de que hace meses se había anunciado una supuesta orden de captura internacional contra las mismas. No se sabe si están en calidad de asiladas o refugiadas.
Por su parte, senadores del Partido Patria Querida (PPQ) manifestaron que los vándalos cuentan con el respaldo de personas del gobierno de Alberto Fernández y también del Foro de Sao Paulo/ Grupo de Puebla, sector que se encuentra ligado a los terroristas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).