Nuevamente, por la mañana de hoy, un yacaré de la laguna de Itá hizo de las suyas al salir de su hábitat para dar un paseo por la ciudad. Ya que días pasados, seis de ellos habían protagonizado el mismo hecho, pero en aquella oportunidad llegaron más lejos, incluso hasta locales comerciales en la zona céntrica de la ciudad.
Afortunadamente, dicho acontecimiento se dio en horas de la noche, por lo que nadie se vio afectado. En conversación con La Nación, Belén Noguera, de los Bomberos Voluntarios de Itá, relató que a las 9:00 de este domingo recibieron el llamado de alerta, por lo que cinco bomberos que estaban de guardia procedieron a salir del cuartel para buscar al animal y devolverlo a la laguna.
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También comentó que los que generalmente suelen salir son los reptiles más pequeños, pero en esta ocasión se trataba de un ejemplar que medía 1,50 metros aproximadamente, por lo que se complicó un poco debido a que es agresivo.
Para que estos animales vuelvan a su ambiente, los voluntarios le tapan la cara y le alzan y llevan de vuelta, si es que son pequeños, pero cuando ya son grandes, no hay de otra que guiarlos con algún objeto largo de manera de mantener la distancia.
“El acontecimiento se da debido al desborde de la laguna por las constantes lluvias que se han registrado en los últimos días, y además de que salen a buscar comida, ya que con lo que llega hasta el lugar no da abasto. En un principio, eran dos o tres nomás, pero ahora son alrededor de 40 ejemplares”, explicó la voluntaria.
Esto, a pesar de que la laguna cuenta con un muro, pero se trata solamente de un alambrado, por lo que sería bastante frágil. Por su parte, la unidad de bomberos voluntarios insta a toda la ciudadanía a comunicarse con la institución a las líneas de emergencia (0992) 914-434 o al (021) 326-3233 para dar aviso en el caso que algún yacaré vuelva afuera de la laguna, y así evitar cualquier tipo de tragedia.
Por otro lado, cabe destacar tras lo sucedido la semana pasada que el medio internacional AFP había publicado una nota al respecto titulada “Caimanes invaden un centro comercial de Paraguay al desbordarse el lago donde viven”.
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Un atractivo y un peligro
Bomberos voluntarios de Paraguay capturaron siete caimanes de entre uno y medio y dos metros en las calles de un centro comercial, en medio de una tormenta que desbordó la laguna Itá, ubicada en el radio urbano de esta ciudad, a 30 kilómetros de la capital, Asunción (sureste). Vecinos aterrados por la presencia de los reptiles llamaron de inmediato a los rescatistas que, después de varias horas, consiguieron atraparlos el miércoles 27 de enero pasado.
Los animales habían escapado a raíz del hundimiento de un muro de contención debido a las intensas precipitaciones que desbordaron el lago, informó a periodistas Francisco Platón, portavoz del Cuerpo de Bomberos de Itá. “Lo que pasa es que la laguna del parque se desbordó por la cantidad de lluvia que cayó y los yacarés (caimanes) salieron buscando refugio en la superficie seca para descansar”, explicó Platón en declaraciones a la AFP.
Varios de ellos alcanzaron la puerta de los comercios, de acuerdo con fotos y videos que difundieron los testigos en las redes sociales. “Por suerte ocurrió de noche. Los yacarés constituyen un atractivo del parque de la ciudad, pero son un peligro cuando se producen fenómenos como este que escapan a nuestro control”, sostuvo Diego Caputo, secretario de la Intendencia de Itá.
Sobrepoblación de caimanes
La temporada de lluvias no cesa en Paraguay desde la semana pasada dejando numerosos daños en viviendas, calles y rutas, así como cortes de energía. La Dirección de Meteorología advirtió que se esperan más precipitaciones hasta el domingo.
La organización civil llamada “Salvemos la laguna de Itá”, reveló en un comunicado que existe una sobrepoblación de caimanes en el lugar. “Con el tiempo puede representar un peligro para las personas. Por falta de alimentos podrían atacarlas”, advirtió, luego de recomendar “no tocarlos”. El Cuerpo de Bomberos pidió a su vez en su cuenta de Twitter “avisar a la línea de emergencia si alguien avista otro yacaré en la vía pública”.