Luego de las quejas presentadas tanto por padres, encargados, docentes y directivos de las instituciones públicas, ante el retorno a clases planificado para marzo de este año sumado a que varias de las instituciones presentan problemas de infraestructura, errores con la plataforma de inscripción y la gran cantidad de contagios de COVID-19 especialmente en Central y Asunción, el ministro de Educación, Eduardo Petta, dio su parecer sobre el tema.

Entre otras cosas, resaltó que ya se cuenta con la experiencia de cómo se comportarán los estudiantes, ya que el año pasado alumnos del tercer año retornaron y no hubo problemas.

“El 9% de los alumnos de los colegios públicos retornó a clases el último mes del año pasado y no hubo ningún infectado. Salieron algunos gremios a decir que se dieron contagios, pero eso no es cierto”, dijo en entrevista con radio Ñanduti y agregó que de esta forma se garantiza el retorno a clases presenciales en forma segura.

Resaltó que con la plataforma están haciendo partícipes a los padres para decidir si sus hijos vuelven o no a las instituciones, para llegar a un consenso y así poder organizarse. “Hoy lo que estamos haciendo es consultar a los padres, a través de una plataforma, si quieren que sus hijos vuelvan a las clases de manera presencial o no”, aclaró.

En otro momento, reconoció que después de 30 años se está llevando a cabo debates para mejorar el sistema educativo; al respecto, admitió que las cosas no están tan bien que digamos. “Así como estamos en las pruebas nacionales e internacionales estamos en los últimos lugares”, sostuvo.

Recordó a los padres y encargados que lo importante es lo que le ofrece el ministerio como Estado y que por lo menos los egresados de bachiller tendrán una base para salir a enfrentar la vida. “Te encontrás con los bachilleratos técnicos en informática que daban clases en pizarrón”, expuso.

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Según su experiencia hay mucho por hacer para mejorar la educación, pero se necesita de la colaboración de todos. “Recorrimos el país con 136 bachilleratos agropecuarios, me encontré a jóvenes durmiendo en los gallineros, en la escuela. Fuimos, invertimos y le cambiamos la realidad”, apuntó Petta.

Apuntó a que existen muchos proyectos de mejoramiento especialmente para el interior del país que estaban muy abandonado: “Dijimos ‘vamos a hacer un proyecto grande’, un proyecto de US$ 50 millones. Pasó por el FEEI, por Hacienda. Estoy hablando de proyectos concluidos. Ellos eligieron que quieren”, sostuvo.

Con el dinero entregado al ministerio mediante la Ley de Emergencia se pagó a los docentes, ya que el ingreso de los impuestos del año 2020 fue casi nulo y no alcanzaría para pagar los salarios. “Porque si nosotros el año pasado dependíamos de los impuestos, íbamos a caer”, aseguró.

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