El viceministro de Salud, Julio Borba, reiteró este miércoles que la situación en los hospitales sigue siendo preocupante ante el aumento de casos del COVID-19. Se estima que enero será “muy duro” por el relajo ciudadano y las fiestas de fin de año.
“En sala común estamos con un 60% de ocupación aproximadamente. La terapia intensiva es lo que siempre estamos a tope. Desde la segunda quincena de noviembre venimos con los números elevados”, mencionó el viceministro en comunicación con la 650 AM.
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Sostuvo que los viajeros que vuelven deben presentar el test negativo de COVID-19, establecido desde el 21 de diciembre para las personas que retornan al país vía aérea y luego se extendió a los compatriotas que lo hacen por tierra.
Borba indicó que la nueva variante del COVID-19 es más contagiosa y no se sabe si es más letal. Destacó que será difícil saber a quién practicarle los test cuando se confirme la circulación de este tipo en el país y lo más probable es que se realice a los viajeros y sus contactos.
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“Cuando circule la nueva cepa ya va a ser difícil saber a quién hacer el test. En todo caso, se hará a los que tuvieron contacto con viajeros de Europa o aleatoriamente. Los análisis de las muestras que se tomen se harán en el Ministerio de Salud y el Laboratorio Central”, agregó.
La cantidad de fallecidos a causa del COVID-19 llegó a 2.437. También hay 93.258 pacientes recuperados y la cifra total de contagios alcanza 117.590 desde el brote del virus en el país, de acuerdo con el reporte del Ministerio de Salud del martes.
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