La jefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, la comisaria María Elena Andrada, confirmó que los agentes policiales no tienen atribución de dispersar las aglomeraciones sino tan solo de corroborar el hecho, labrar acta y comunicar a la Fiscalía sobre el incumplimiento de los protocolos sanitarios como el uso correcto de tapabocas, lavado de manos y distanciamiento social.

“La podrida empezó entre el viernes, sábado y domingo, días en que la gente motivada por el exceso de calor y el feriado puku (largo) se volcó masivamente hacia el interior. Hemos tenido algunos locales y balnearios intervenidos por la policía”, afirmó Andrada en contacto con 1000 AM.

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Ante el reclamo por falta de controles en balnearios, playas y locales nocturnos negó que los uniformados adopten un comportamiento pasivo. Sin embargo, reconoció que, ante las aglomeraciones, los agentes no pueden hacer mucho más que persuadir a las personas a cumplir con los protocolos sanitarios.

“Le cuento a la gente o a la audiencia, que la atribución o la potestad o la facultad de la policía en caso de incumplimiento del decreto presidencial, solamente va hasta labrar un acta y comunicar a la instancia judicial respectiva, o sea al Ministerio Público, hasta ahí va nuestra atribución”, aseguró.

Decenas de aglomeraciones de personas se registraron en balnearios y locales nocturnos durante este fin de semana. Baile, bebidas alcohólicas y falta de distanciamiento fueron la constante en diversos puntos del país. En tanto que la ciudadanía reclama la falta de presencia y control a la Policía Nacional ante el aumento de casos de COVID-19 a nivel país.

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En el balneario El chorro de Horqueta se observan conservadoras repletas de bebidas alcohólicas, con sus propietarios bailando a orilla del arroyo. Ninguno utilizaba tapabocas, mucho menos guardaba el distanciamiento recomendado para mitigar posibles contagios de COVID-19.

Andrada recordó una aglomeración importante ocurrida en Caaguazú, donde señaló que habían más de 300 personas en un balneario. “Son sitios donde había 5 a 7 familias, lo policía iba y recordaba la vigencia del decreto y la gente optaba voluntariamente por juntar sus cosas para levantar campamento. En la zona de Caaguazú la afluencia de personas fue impresionante”, afirmó.

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Mientras que en San Bernardino se viralizaron videos en los que se constata una importante cantidad de personas que se congregaron en un boliche de la zona sin seguir las recomendaciones sanitarias, sin contar con distanciamiento social o el uso de tapabocas.

El Poder Ejecutivo emitió el decreto Nº 4.525, que dispone las nuevas medidas sanitarias en el marco del Plan de Levantamiento Gradual del Aislamiento Preventivo General a causa del COVID-19, que está vigente desde el 21 de diciembre al 10 de enero.

En uno de sus puntos ratifica que está prohibida la habilitación de las piscinas de acceso público, balnearios y playas. Ante ello, exhorta a los municipios a propiciar otros espacios al aire libre, como plazas, parques o calles peatonales a fin de garantizar el distanciamiento físico.