Familiares de pacientes internados en terapia intensiva por COVID-19 en sanatorios privados denunciaron que delincuentes simulan ser médicos para solicitarles montos importantes de dinero para supuestamente no retirar a los enfermos de la unidad de terapia intensiva (UTI). Ocurrió en cuatro sanatorios privados de Asunción y Central durante esta semana.

En consecuencia, el Ministerio de Salud aclara que no solicitará ningún tipo de pago por la ocupación de camas de UTI a familiares de pacientes con COVID-19 que estén hospitalizados y advierte sobre esta nueva modalidad de estafa a familias, que ya está siendo investigada por la Policía Nacional.

Leticia Pintos, directora de Terapia y Servicios del ministerio, manifestó que familiares de cuatro pacientes en UTI recibieron pedidos de dinero por parte de personas inescrupulosas, quienes se hicieron pasar por autoridades de centros asistenciales privados, para requerir importantes montos con el supuesto propósito de mantener al enfermo dentro de la terapia intensiva. “Quien saca dinero a los pobres y desesperados no tiene perdón de Dios. Espero que pronto den con los estafadores”, afirmó.

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No realizan pedidos de dinero por internaciones

“Nunca nadie les va a llamar a los familiares para pedirles dinero por la cama de UTI. Es increíble, ellos saben detalladamente la situación del paciente y manejan la información de los familiares. Es una vergüenza jugar con la salud de los demás. Llaman a familiares de pacientes que están en UTI y les piden dinero para seguir ocupando esa cama”, manifestó la doctora Pintos.

Salud Pública advirtió que se trata de personas inescrupulosas que a través de llamadas telefónicas se hacen pasar por médicos para pedir dinero por internados en el sistema sanitario público o privado. Los estafadores dicen que si no pagan una suma importante de dinero sacarán a los pacientes de UTI.

“Si el paciente está en terapia es porque está grave y si está grave el sanatorio tiene la obligación de darle el sostén hasta que se estabilice. La gente de repente es inocente y cuando uno está desesperado cree cualquier cosa. Uno no piensa cuando está asustado. No puede ser que ante tanto sufrimiento esto más se tenga que sumar”, afirmó Pintos en contacto con 1080 AM.

Dos familias fueron víctimas y pagaron

Lamentan que dos familias fueron víctimas y pagaron los montos requeridos a los estafadores a través de giros telefónicos que pidieron sumas entre G. 2 a 4 millones a personas humildes que tienen a sus parientes en terapia intensiva. “Tenemos dos casos de los cuatro que denunciaron esta semana que sí hicieron el depósito. Es una pena, realmente. La familia a veces no tiene qué comer”, lamentó Pintos.

“Buen día, disculpe, ¿usted es familiar de Arias? Soy el vicedirector del sanatorio, si se pueden comunicarse conmigo, soy el doctor Vasconsellos. Acá están firmando los documentos para los presupuestos. Si me podés pasar el comprobante de pago”, dice la voz anónima detrás del intento de estafa a personas desesperadas que tienen familiares internados padeciendo COVID-19.

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Recordó que el Ministerio de Salud suscribió un convenio especial con sanatorios privados dentro del Departamento Central y otras grandes ciudades del interior como Encarnación y Ciudad del Este, para la derivar pacientes con COVID-19. “En este momento tenemos 37 pacientes en el sector privado y cada internación en UTI tiene un costo de G. 13.500.000 por día”, declaró.

El Ministerio de Salud solicita a la población en general estar atentos ante este tipo de situaciones y de ser contactados por dichos estafadores, comunicarse inmediatamente al 911 o la Fiscalía. “La Policía Nacional ya cuenta con los datos y se está investigando para dar con los estafadores. También estamos verificando con la empresa telefónica”, afirmó el comisario Nimio Cardozo, jefe de Antisecuestros.

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